De Torre ofrece «diálogo» y «lealtad» institucional para capear la crisis

Lealtad institucional y «diálogo» para capear la crisis. Con ambas premisas, Javier de Torre tomó ayer posesión oficial de su cargo como subdelegado del Gobierno en Cádiz de la mano de la delegada en Andalucía, Carmen Crespo, en un acto en el que estuvo arropado por autoridades políticas de toda la provincia (no solo alcaldes del PP) y de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. También estuvo muy presente la negativa cifra del desempleo, que se había dado a conocer apenas unas horas antes.

De hecho, el paro centró buena parte del discurso que ofreció Javier de Torre, que quiso además dedicar sus primeras palabras «a esos miles de gaditanos en situación de desempleo o que están viendo peligrar su actual puesto de trabajo», y les trasladó su «firme compromiso de luchar con tenacidad» y poner su «esfuerzo» en «mejorar las condiciones sociales y laborales» en la provincia, que «no debe acostumbrarse a vivir con una cifra de desempleados tan tremenda como la actual».

De Torre reconoció que no será «una tarea fácil, ni rápida», pero se ofreció «desde la lealtad más absoluta» a colaborar con todas «las instituciones, organismos, representantes sociales y económicos» a «facilitar unas perspectivas futuras mejores» para la recuperación económica.

En este sentido, aseguró que «las puertas de esta Subdelegación siempre van a estar abiertas para potenciar la resolución de conflictos», «manteniendo un permanente diálogo con las demás instituciones» y se presentó como un subdelegado «de todos y para todos».

Aunque no hizo mención explícita a los grandes proyectos que dependen del Gobierno, como el segundo puente, la línea de alta velocidad o Las Aletas, sí dedicó algunos guiños, y manifestó que es necesario «concluir antiguas infraestructuras» y «abordar obras nuevas», así como «acercar los grandes flujos de transportes a la industria y centros de producción y almacenaje» de una provincia «con peculiaridades concretas» y «compleja en su gestión», dada su «diversidad territorial y administrativa, por ser puerta sur geográfica de Europa».

De Torre también hizo referencia a los problemas de la agricultura, de la pesca, del turismo o «el tan sufrido sector industrial» y por su puesto, no olvidó «retos inmediatos» como la conmemoración del Bicentenario de la Constitución de 1812. Una efeméride con la que reafirmó «la apuesta del Gobierno español» al que representa.

Por último, además de reconocer la profesionalidad de los funcionarios de la Subdelegación, dedicó su «sincera admiración y felicitación» al trabajo «abnegado y vocacional» de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad y las Fuerzas Armadas por su esfuerzo, que «no es entendido en momentos puntuales», en una clara referencia a las recientes intervenciones de los antidisturbios en la Facultad de Filosofía y Letras de Cádiz y ante el Ayuntamiento de Jerez. Dos polémicas con las que De Torre ha tenido que lidiar en sus primeros días en el cargo, y ante las cuales ha respaldado siempre la actuación policial. «En este subdelegado -les dijo ayer- vais a encontrar a un compañero a la hora de trabajar por mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos y garantizar su seguridad».