«Queríamos que el Supremo confirmara nuestra inocencia»

«Estamos convencidos de nuestra inocencia y de nuestra legitimidad, por eso queríamos un pronunciamiento del Tribunal Supremo sobre la multa de la Comisión Nacional de la Competencia (CNC) por el cupo de ventas», enfatizó ayer el presidente del Consejo Regulador del Vino, Antonio Fernández.

Sin embargo, finalmente la Denominación de Origen del jerez no podrá obtener la nulidad de la multa que esperaba acudiendo al Supremo, ante el que habían interpuso un recurso de casación con el que pretendían sobre todo lavar su imagen y que «no tuviéramos que arrastrar la sensación de culpabilidad».

Tal como recalcaron ayer Fernández y el director general de la Denominación de Origen, César Saldaña, no se trataba de agotar la vía judicial solo por no pagar la multa de 100.000 euros -tras la reducción del 75% de los 400.000 iniciales decretada por la Audiencia Nacional-, sino establecer que no se actuó mal estableciendo un cupo de ventas para las bodegas en función de sus ventas históricas y no de sus existencias reales -una medida ya extinguida-.

Pero tal como informaron ayer desde el Consejo Regulador el alto tribunal ni siquiera ha admitido el recurso por la simple razón de que la cuantía de la multa no alcanza el mínimo exigido para este tipo de instancias, para los que se establece un importe de al menos 150.000 euros.