Gadir Solar plantea ampliar el ERTE dos meses más
Los empleados temen que el expediente pase a extintivo después de las elecciones autonómicas
CÁDIZ. Actualizado: GuardarLa empresa Gadir Solar ha planteado a la plantilla ampliar el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) de seis meses que tienen en vigor y que finaliza en febrero. Ante esta situación, los trabajadores dejaron claro que «no se fían», ya que se trata de «una empresa traída por la Junta y hay unas elecciones a la vista», temiendo que el expediente se convierta en «extintivo» una vez pasados los comicios.
Fuentes de los trabajadores explicaron ayer que la dirección les argumenta que «se han retrasado más de lo previsto» los fondos reembolsables europeos a los que la empresa quería tener acceso para reiniciar la actividad. De esta forma, la idea es «poner la planta en marcha y, con eso, intentar conseguir delegar en un inversor industrial fuerte y con capital».
Otro de los argumentos esgrimidos por la compañía es que tienen algunos contratos «en vías de que finalmente se conviertan en realidad», pero que «tampoco están concretados». Así las cosas, les resumen a los trabajadores que «al no tener ningún contrato, ni los fondos reembolsables, no hay dinero para reiniciar la actividad».
Según comentan los empleados, la empresa les proponía en un principio ampliar el ERTE en dos meses, pero «ahora se ha descolgado con seis», lo cual es «impensable». En este sentido, explican que están dispuestos a aguantar dos meses, ya que es el tiempo de retribución que le queda a la mayoría de la plantilla y «siempre que veamos que hay un proyecto de trabajo detrás». Y es que los empleados afectados tienen ocho meses de paro. Además, apuntaron que sospechan que, teniendo en cuenta la cercanía de las elecciones, haya alguna intención de «prolongar la agonía» unos meses y que después se produzca un ERE extintivo, con lo que «nos quedaríamos sin trabajo y sin ningún ingreso».
La compañía Gadir Solar, especializada en la producción de paneles fotovoltaicos de última generación, mantiene desde julio a prácticamente toda la plantilla en el ERTE. La empresa ha logrado cerrar un acuerdo con los acreedores para retrasar los pagos pendientes y no ir a un concurso de acreedores, pero las ayudas europeas resultan fundamentales para volver a poner en marcha la factoría. La previsión de la empresa era poder abrir en noviembre. Sin embargo, la demora en la tramitación de estos fondos ha hecho imposible cumplir con esas expectativas.