Jerez

Aplazada la declaración de Ruiz-Mateos prevista para mañana

La Audiencia Nacional acepta la solicitud del empresario, que asumió toda la responsabilidad en la gestión de Nueva Rumasa

JEREZ. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz ha aceptado la solicitud formulada por el fundador de Nueva Rumasa, el jerezano José María Ruiz-Mateos, de suspender su declaración como imputado prevista para mañana miércoles, cuyo señalamiento se produjo también a petición del empresario, según informaron fuentes jurídicas cercanas al caso.

De esta forma, la Audiencia aplaza la que iba a ser la segunda declaración del patriarca de los Ruiz-Mateos, dentro de la causa que investiga la presunta estafa a los inversores de pagarés de Nueva Rumasa y en la que está imputado por presuntos delitos de estafa, insolvencia punible y administración desleal.

Esta retirada de intenciones se produce después de que el empresario jerezano no acudiera a declarar la semana pasasa ante el Juzgado de Instrucción número 3 de Palma de Mallorca alegando enfermedad, donde iba a ser interrogado por una presunta estafa de 13,9 millones de euros a Inversiones Grupo Miralles en la operación de compraventa del Hotel Eurocalas. La juez le ha citado para el próximo 24 de enero; es decir, el martes de la semana que viene. Cabe recordar que, en su primera comparecencia ante la Audiencia Nacional, el patriarca de los Ruiz-Mateos se atribuyó toda la responsabilidad de la gestión de Nueva Rumasa y eximió a sus hijos de las tomas de decisiones. La causa se encuentra bajo secreto de sumario.

Ruz también mantiene como imputados a su mujer, Teresa Rivero, a sus seis hijos varones y a su sobrino Zoilo Pazos por los mismos delitos. Todos ellos declararon también el pasado octubre y achacaron al patriarca toda la responsabilidad al frente de Nueva Rumasa.

Anticorrupción concluyó que la familia Ruiz-Mateos captó 385,3 millones de euros de 4.110 inversores mediante la emisión de pagarés de 13 empresas de Nueva Rumasa. Los fiscales fijan en 289,1 millones el total que queda por abonar a los inversores, ya que el grupo abonó algo menos del 25% de las obligaciones.

El 9 de septiembre de 2010, los Ruiz-Mateos vendieron parte de las sociedades de Nueva Rumasa al empresario experto en quiebras Angel de Cabo. Ruz citó al nuevo propietario a declarar como testigo el 21 de noviembre para explicar el proceso de compra, pero finalmente suspendió su comparecencia y decretó el secreto de sumario.