Un triunfo para calmar las aguas

El Xerez logró un merecido triunfo por la mínima (2-1) ante el Hércules, el segundo seguido en Chapín, que le sirve para alejarse a cinco puntos de la zona de descenso, mientras que el equipo alicantino, que acabó con nueve al ser expulsados Sergio y Diego Rivas, pierde gas, pero se mantiene entre los seis primeros de la tabla.

Inmerso en una crisis deportiva e institucional por la polémica que ha suscitado la venta del club, el equipo xerecista llevó la iniciativa y tuvo las mejores ocasiones, en tanto que el Hércules se limitó a estar a la expectativa y fue sorprendido muy pronto, al encajar su primer gol a los trece minutos. Una gran jugada entre José Mari y Capi finalizó con un disparo de Cordero a la escuadra desde la frontal del área.

Sin embargo, cuatro minutos más tarde empató a uno el Hércules. El exjugador xerecista Carlos Calvo lanzó una falta desde la izquierda y Urko Vera, solo en el punto de penalti, peinó el balón para introducirlo en la meta defendida por Toni Doblas.

El partido transcurría con poco juego y escasas llegadas a ambas porterías. El conjunto alicantino lo intentaba a balón parado y Urko Vera estuvo a punto de anotar el segundo para el Hércules a los 34 minutos de juego.

Respondió el Xerez con una gran jugada de Capi, que estuvo muy inspirado en la creación del juego de los locales, pero José Mari no pudo rematar bien. Y un minuto después Israel volvió a adelantar al equipo xerecista tras finalizar un contragolpe iniciado por él mismo.

En la segunda mitad, y tras la expulsión del visitante Sergio, el Hércules pudo empatar la contienda. Sin embargo, un disparo de Felipe Sanchón, en el minuto 84, se marchó rozando el travesaño.

Al final, la expulsión del excadista Diego Rivas condicionó aún más el partido y el Xerez amarró tres valiosos puntos para alejarse un poco más de la zona complicada de la clasificación y, de paso, acabar con buen sabor de boca una semana realmente complicada lejos del rectángulo de juego.