LAS MUJERES DE GRIÑÁN TOMAN PARTIDO

EL proceso de sucesión de Rodríguez Zapatero al frente de la secretaría general del PSOE tiene dividido no sólo el corazón político de Griñán, sino también su gobierno. La presencia de Rubalcaba y Carme Chacón esta semana en Sevilla para captar votos de los delegados andaluces, la federación más numerosa y decisiva en la elección del próximo líder socialista, ha colocado ante el foco las adhesiones o simpatías de los socialistas relevantes. Entre los miembros del ejecutivo de Griñán destaca cómo los hombres se guardan las espaldas y las mujeres se muestran más, es decir, sin complejos a la hora de mojarse. La primera en hacerlo fue la consejera de Presidencia y portavoz del Gobierno, Mar Moreno, abiertamente a favor de Carme Chacón. Lo mismo ocurre con su paisana Micaela Navarro, quien ha confesado su adhesión inquebrantable a Alfredo Pérez Rubalcaba, a quien conoció hace 20 años.

En el bando de Micaela, es decir, en el de Rubalcaba, también se vio a María Jesús Montero. La consejera de Salud se sentó en las primeras filas del mitin que dio el exministro del Interior en un hotel sevillano y antes del mismo mostró su entusiasmo con su trayectoria. Lo paradójico es que Montero no es militante, por tanto no podrá ir como delegada al congreso de Sevilla y tampoco podrá votar. No vale.

Sí vale Carmen Martínez Aguayo, pero la consejera de Hacienda, fiel a su jefe Griñán, se ha colocado la camiseta de militante de la neutralidad activa y no quiere decir a quién prefiere. En la misma situación está la esposa de Griñán, María Teresa Caravaca. Asistió primero al mitin de Rubalcaba y se pensó que lo hacía como simpatizante, pero dos días después acudió al mismo hotel con Chacón y sembró la duda.

En igual situación está Susana Díaz, quien como secretaria de Organización tampoco va a revelar su favorito. Pero es significativo que el presidente de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos, totalmente de su cuerda, acudiera solo al mitin de Chacón y no al de Rubalcaba. El caso de Rosa Torres, como el de Mar Moreno, es distinto. Desde el primer momento la presidenta del PSOE se adhirió a la causa de Chacón. Con esta parece que también está Clara Aguilera, aunque no se le vio en el mitin de Sevilla. Como tampoco a ninguno de los consejeros hombres. Hay quien ve en esta división un reparto de papeles con Griñán de árbitro. Si es así parece que va ganando Carme Chacón. ¿Sintomático de a quién prefiere Griñán? Hay quien dice que sí.