Se acaba lo malo, palabra de chamán
Actualizado: GuardarLos chamanes, como los físicos y los poetas, creen que todo el mundo está conectado. La vibración de aquí es un impulso allá. Manejan el concepto globalización con la misma soltura que visten esos collares y ponchos de la Amazonia y las altiplanicies surandinas. Los doce mejores de Perú se han reunido en un cerro de Lima para neutralizar la Apocalipsis anunciada en el calendario maya -aprovechen, el mundo se acaba el próximo 21 de diciembre- y sembrar el planeta de buenos farios. Canciones y flores para Cristina Fernández de Kirchner y Hugo Chávez -están convencidos de que sus cánceres son pan comido- y unos escupitajos para el nuestro, para Mariano Rajoy. No, no es por la subida de impuestos, sino para darle buena suerte al presidente, con canciones, rezos y coca mascada. Como buenos chamanes globales, le desean lo mismo al nuevo líder norcoreano, Kim Jong Un, y a Obama. En primer plano vemos a Juan Osco, el jefe de este clan, con sombrero negro y los mejores augurios para 2012: «El mundo no se acaba, se acaba lo malo, la venganza y la cólera».