Manzano deja KO al Atlético
El naufragio de los madrileños en el Calderón no fue el único en una jornada copera en la que también cayeron Zaragoza, Villarreal y Betis El técnico sufrió una despedida bochornosa tras la eliminación ante el Albacete
MADRID. Actualizado: GuardarA Goyo Manzano no se le ha respetado desde el principio en la zona noble del Calderón, ni tampoco desde un sector de fascistas que desde la grada pidieron hasta su muerte, pero ha hecho méritos sobrados para su destitución. Deja a un Atlético en estado comatoso, a diez puntos de la zona 'Champions' y eliminado en la primera ronda de la Copa del Rey ante un Albacete de Segunda B que pareció el equipo grande en El Manzanares y supo disfrutar de su gran noche jugando siempre a favor de corriente. Los manchegos ganaron en la ida, repitieron triunfo en la vuelta y nunca sufrieron por la eliminatoria.
Fracaso sin paliativos de un proyecto errático desde que el técnico jienense llegó como cuarto plato. El populista 'Cholo' Simeone se va a encontrar un club que sufre una guerra civil entre los propietarios y su afición, que ya se toma a broma tanto ridículo. Jamás en su historia los rojiblancos habían caído ante un rival de esta categoría, aunque sí sucumbieron frente a siete conjuntos de la división de plata y, en los años treinta, ante dos 'terceras' como el Castellón y el Valladolid.
Jugaron con desacierto pero una actitud irreprochable en la primera mitad, y dimitieron por completo en la segunda, mientras la hinchada apelaba a su hombría, arremetía contra Manzano y pedía la cabeza de Miguel Ángel Gil.
El Atlético pone un circo y le crecen los enanos. Si sus jugadores ya estaban confusos por su mal momento, el resultado inquietante de la ida, la destitución oficiosa de su técnico y la llegada inminente del nuevo inquilino del banquillo, nada más empezar sufrieron un golpe impensable que les puso de los nervios. El Albacete les sorprendió presionando muy arriba y con un golazo a los 22 segundos. Un robo de balón y un gran tiro de Víctor Curto que entró pegado al palo. Los hinchas manchegos lo festejaban en el Calderón al grito de «Manzano, quédate!». Surrealismo puro.
Castigo para los rectores del Atlético por confirmar a un entrenador por tres partidos a sabiendas de que no va a seguir. Simeone tiene trabajo. ¿Y qué tal un psiquiatra?
Cúmulo de desastres
Pero el naufragio del Atlético de Madrid en el Calderón no fue la única sorpresa de una jornada copera en la que otros tres 'primeras', Betis, Zaragoza y Villarreal, dijeron adiós a la competición por la puerta de atrás.
El Alcorcón volvió a convertirse en protagonista de la Copa del Rey al eliminar a un rival de Primera división, en esta ocasión un Real Zaragoza que sigue perdido y al que solo le queda esta temporada el objetivo de intentar salvar la categoría. Al conjunto aragonés le costó muy poco confirmar sobre el césped la grave crisis de juego que atraviesa, practicando un fútbol sin ningún tipo de criterio que permitió a los madrileños asentarse poco a poco y tomarle la medida al partido.
El Betis volvió a ser presa del Córdoba en la Copa del Rey, en un partido que no será recordado por su calidad por los aficionados.
El conjunto sevillano, una vez más, jugó sin ritmo, sin fútbol y sin garra ante un rival que hizo lo necesario para llevarse la eliminatoria, como lo hizo en el 2009, en la primera vez que se enfrentaban los dos equipos en la competición del KO (entonces se impuso 1-2).
Y si grave fue el batacazo de Atlético, Zaragoza y Betis, no menos dramático fue el del Villarreal, que perdió 0-2 en El Madrigal ante un Mirandés que le pasó por encima a un equipo completamente muerto. La situación en el conjunto castellonense va de mal en peor, pues en pocas semanas se han visto fuera de Europa y de la Copa del Rey.
Otros resultados destacados fueron la derrota del Racing de Santander frente al Rayo Vallecano, que pese a todo consiguió el pase a octavos de final por el valor doble de los goles lejos de casa, o el empate entre Osasuna y Almería que dio el pase a los de Mendílibar, que ya ganaron con comodidad en la ida. El Granada ganó a la Real Sociedad en Los Cármenes, pero no fue suficiente para contrarrestar el 4-1 de la ida, y también pasó el Málaga al empatar a dos ante el Getafe.