
No habrá 'truenos' esta Navidad
La Guardia Civil aumenta las inspecciones en bazares antes de las fiestas y descubre 21 infracciones en toda la provincia Intervienen un millar de petardos 'Big Lande', cuya venta está prohibida
Actualizado: GuardarLos petardos se llaman 'Big Lande', aunque, al nombrarlos cualquiera diría que los han bautizado como 'Bin Laden' en un macabro recuerdo del líder terrorista. Incluso en algunos foros sobre pirotecnia se refieren a ellos con el nombre del líder de Al Qaida. El juego de palabras, aparte de ser poco afortunado, está servido para referirse a estos explosivos que desde el año pasado están prohibidos por ser considerados peligrosos.
Con la Navidad en ciernes, la Guardia Civil ha incrementado el número de inspecciones de establecimientos en los que hay sospechas de que se puedan vender estos y otros artículos de pirotecnia sin los controles exigidos, y como resultado se ha incautado de un 'arsenal' con un millar de los citados 'Big Lande', embalados en cajas de cinco unidades, en las que se advierte de lo peligrosos que pueden llegar a ser: por ejemplo, indica que la onda expansiva de cada petardo puede alcanzar los diez metros de diámetro.
Para hacerse una idea de los daños que estos petardos pueden causar a su alrededor, solo hay que echar la vista atrás a una noticia que acaparó los titulares la pasada semana: varios 'artefactos' explosivos estallaron en los alrededores del estadio deportivo de la Cartuja, en Sevilla, y destrozaron unos macetones de hormigón. Hasta los 'tedax' acudieron a buscar posibles bombas, aunque finalmente se comprobó que se trataba de un acto vandálico, ocasionado con varios petardos de gran tamaño. Como los Big Lande, calificados como Clase III (la máxima autorizada).
Más pólvora de la permitida
Lo cierto es que la venta de este tipo de «truenos de gran potencia», como reza el embalaje, era legal en España hasta hace un año, cuando se comprobó que en realidad tenían «una carga de pólvora tres veces superior a la permitida», según explicaba ayer el portavoz de la Guardia Civil a los periodistas a los que se mostró el arsenal, en la comandancia de Cádiz. En la rueda de prensa se explicó que en las 34 inspecciones realizadas en los últimos días, la mayoría en bazares, se llegaron a denunciar 21 infracciones. En estos casos no se detiene a los responsables, pero sí se les sanciona.
Los 'Big Lande', sin embargo, no se intervinieron en el interior de un bazar. Fueron hallados hace una semana en una furgoneta interceptada en un control de carretera en la carretera A-393, entre Chiclana y Medina, que se dirigía a uno de estos locales de venta al público. Además de los 'Big Lande', se decomisaron otros artículos explosivos dentro del vehículo, algunos también peligrosos, como bengalas pensadas para accidentes marítimos, o tracas de gran tamaño; y otros inofensivos, como bengalas «de la felicidad», que apenas echan chispas al prenderlas. En todo caso, el conductor no contaba con la documentación que se exige para estos productos peligrosos.
En toda la provincia solo hay tres establecimientos especializados y autorizados para la venta de artículos explosivos, y la compra sin control puede resultar peligrosa, sobre todo, si la realizan menores. Por tanto, la Guardia Civil quiso enviar ayer un mensaje de responsabilidad a los ciudadanos para que extremen el cuidado a la hora de adquirir estos productos.