El gráfico del Ibex, ayer, en la Bolsa de Madrid. :: JAVIER LIZÓN / EFE
Economia

La amenaza de Standard & Poor's enfría el ánimo de los inversores

La agencia invita a los gobiernos de España e Italia, entre otros, a aprovechar la «luna de miel» de los mercados y lanzar más reformas

MADRID. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Los inversores parecen haber optado por esperar y ver. La agencia de calificación Standard & Poor's amenazó en vísperas de la trascendental cumbre europea del 8 y 9 de diciembre con una rebaja generalizada de la calidad crediticia de los países de la zona euro -incluidos Alemania y los otros cinco que aún mantienen la nota de 'excelente'- y en los parqués se recibieron con relativa calma esas alertas. Tampoco causó impacto el recordatorio de que una decisión de este tipo podría acarrear un mayor coste de financiación para el fondo de rescate común creado para acudir en ayuda de los países que sufren ataques especulativos.

Salvo Francfort, el resto de las Bolsas reaccionaron con templanza. En los mercados secundarios de deuda, la prima de riesgo de España se tensó de nuevo, al pasar de los 292 puntos básicos del cierre del lunes a las 302 unidades en que se movía al concluir la sesión, y la de Francia volvió a rebasar los 100 puntos para quedar en 105. La rentabilidad de los bonos germanos descendió al 2,18%, frente al 2,20% de la víspera. Y el diferencial del bono italiano de diez años con el alemán del mismo plazo siguió bajando hasta 368 puntos básicos, todavía bajo la influencia de los planes de austeridad anunciados por el Gobierno de Mario Monti.

Los mercados de valores de Madrid y Londres cerraron prácticamente planos, con alzas del 0,08% y el 0,01% respectivamente. En un día de fiesta nacional, el Ibex-35 de la Bolsa española conservó el nivel de los 8.712,8 puntos, que mantiene las pérdidas anuales en el 11,63%. Milán cedió el 0,49%, el CAC-40 de París retrocedió el 0,67% y la más sensible a las advertencias de la agencia norteamericana fue Francfort, donde el Dax de referencia registró al cierre un descenso del 1,27%. Alemania no está acostumbrada a que le llamen la atención y mucho menos a que le pasen factura por la «falta de respuesta» de los políticos a la crisis.

En una conferencia telefónica, Moritz Kraemer, responsable de la agencia para la calificación de la deuda soberana de los países europeos, centró sus recomendaciones en los más vulnerables, y aprovechó la circunstancia de que la presión de los mercados ha cedido para recomendar a los nuevos gobiernos de Italia, España, Grecia y Portugal que no dejen pasar esta «luna de miel» y aceleren las reformas necesarias para recuperar la confianza de los inversores.

Kraemer incidió también en los argumentos que han llevado a la agencia a intensificar sus advertencias. En relación al Consejo Europeo, reconoció que «los políticos conocen los desafíos y trabajan en su solución», pero añadió que, a la luz de la experiencia, podría ocurrir que no tuvieran éxito, lo que causará «otra degradación en la confianza de los mercados, y eso dañaría las previsiones económicas, que cada mes que transcurre se parecen algo más a una recesión».

La primera reacción de los políticos al informe de S&P consistió en un comunicado conjunto de los gobiernos francés y alemán limitándose a «tomar nota» de la amenaza. Después vinieron los comentarios. La canciller Angela Merkel aseguró que la responsabilidad de las decisiones que toman las agencias «les corresponde exclusivamente a ellas», e invitó a centrar la atención en la cumbre de Bruselas. Para el ministro germano de Finanzas, Wolfgang Schaüble, este tipo de advertencias proporcionan a los dirigentes europeos «la mejor motivación posible». Y para el primer ministro de Francia, Francois Fillon, suponen una «advertencia colectiva» que incita al desendeudamiento de Estados, empresas y familias.

No opinó lo mismo el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, que consideró «exagerada e injusta» la comunicación de Standard & Poor's. «Me asombra mucho que esta noticia caiga del cielo en vísperas de la cumbre europea y no creo que pueda ser una coincidencia», manifestó.

El comisario europeo de Servicios Financieros, Michel Barnier, comentó que la advertencia es solo «una opinión entre otras». «Lo que ha dicho S&P es una apreciación y una opinión entre otras», aseguró Barnier en un comunicado, en el que lanzó un nuevo llamamiento para reducir la dependencia de las notas de las agencias de calificación de riesgos.