También podría demorarse el derribo del puente
Actualizado: GuardarLos temores de la asociación de vecinos de Palos Blancos van aún más allá ya que el retraso en la apertura del paso inferior para vehículos y peatones puede conllevar un aplazamiento también del esperado derribo del viejo puente de San José Obrero. Según lo previsto en un principio, el puente sería demolido un mes o mes y medio después de que los coches pudieran circular ya con normalidad entre las avenidas Caballero Bonald y Voltaire.
Si finalmente el nuevo vial no se inaugura hasta finales de diciembre como temen los vecinos, no será prácticamente hasta febrero cuando el vetusto puente pase por fin a la historia de la ciudad. De llegar a confirmarse, la mala noticia afectaría especialmente a la comunidad educativa del CEIP San José Obrero, que espera como agua de mayo la desaparición de un verdadero obstáculo que obliga a muchos padres a desplazarse en coche aunque vivan cerca del colegio por la imposibilidad de cruzar a pie.