La confianza en una solución a la crisis de la deuda dispara las Bolsas
En medio de rumores y desmentidos, los inversores optan por esperar buenos resultados de la cumbre del 9 de diciembre
MADRID. Actualizado: GuardarJornada de euforia en las Bolsas europeas, con los inversores animados por la expectativa de que pueda cuajar alguna de las muchas soluciones apuntadas para la crisis de la deuda soberana y por la apertura fuertemente alcista del parqué de Nueva York, impulsado a su vez por las jugosas ventas que el comercio realizó en el 'viernes negro', la fecha en que las familias norteamericanas empiezan a realizar las compras navideñas.
El Ibex35 ganó el 4,59% -la cuarta mayor subida del año- hasta 8.119,9 puntos, mientras la prima de riesgo de España se desinflaba para quedar en 424 puntos básicos al cierre de la Bolsa. Los bancos fueron los principales beneficiarios, con alzas del 6,76% en el Popular, del 6,19% en el BBVA y del 5,27% en el Santander, pero también las compañías más ligadas a la evolución de la actividad como Telefónica, la metalúrgica Arcelor o la petrolera Repsol se vieron favorecidas con notables incrementos.
El sector financiero fue también protagonista de los significativos avances de otras plazas europeas. El CAC 40 de París se disparó el 5,46%, mientras que las subidas de los principales indicadores de Milán y Francfort fueron del 4,6% y solo el Footsie de Londres quedó algo rezagado, al limitar su aumento al 2,87%. La fiesta se extendió a la mayoría de los bancos, con revalorizaciones tan notables como las de BNP en un 10,33%, Societé Generale en un 9,2%, Credit Agricole en un 8,88% y Deutsche Bank en un 7,2%.
Los parqués habían abierto con los malos pronósticos de Moody´s, que alertó de una potencial rebaja generalizada de calificacione. Pero los abundantes rumores acerca de las iniciativas que tendrían entre manos los principales dirigentes europeos y las instituciones internacionales para atajar la crisis de la deuda imprimieron un positivo giro a los mercados, pese a las puntualizaciones y desmentidos. El FMI rechazó que esté preparando una ayuda de 600.000 millones de euros destinada a Italia, mientras Berlín descartó la posibilidad de que cinco 'robustos' países de la zona euro busquen un concierto para lanzar bonos conjuntos de alta calificación.
Merkel y Sarkozy preparan, eso sí, las propuestas que presentarán a la cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno del 9 de diciembre, basadas en el sometimiento de los países a un estricto control presupuestario. Los inversores entienden que la contrapartida a esa disciplina vendrá en forma de soporte del Banco Central Europeo mediante la continuidad de la compra de bonos nacionales, que podría realizarse de forma masiva si fuera necesario. El vicepresidente y Comisario de Competencia de la Unión Europea, Joaquín Almunia, se ha declarado convencido de que Europa pondrá en marcha finalmente los eurobonos, al tiempo que advirtió de que los 'pactos intergubernamentales' que marginen a las autoridades comunitarias «están destinados al fracaso».
Compras del BCE
De momento, el Banco Central Europeo sigue rindiendo cuentas de su actuación en los mercados secundarios de deuda sin aportar detalles. Acaba de informar de que las compras de bonos en mercados secundarios que realizó la pasada semana alcanzaron un importe de 8.581 millones de euros, lo que arroja una intervención total por importe de 203.500 millones desde el inicio de este programa, el pasado mayo.
Las últimas compras fueron, según los expertos, en su mayor parte títulos italianos. La deuda del país transalpino sufrió días atrás una fortísima presión de los especuladores y las tensiones no parecen haber cedido. Ayer el Tesoro italiano tuvo que pagar un 7,3% en una emisión de obligaciones con vencimiento en 2023, frente al 4,3% de la colocación precedente.
Otros países también pagan la factura de la crisis, y también Bélgica -que el pasado viernes vio recortada su nota de solvencia por Standard & Poor's- tuvo que comprometer un rendimiento del 5,8% para colocar sus bonos a diez años. En la primera jornada de la semana, los ahorradores italianos han tenido la oportunidad de comprar bonos nacionales sin tener que abonar a los bancos las correspondientes comisiones.
No hay datos sobre la colaboración prestada por los particulares a esta iniciativa que, con el propósito de infundir confianza en la situación de las finanzas italianas, pese a su elevado endeudamiento, volverá a repetirse el 12 de diciembre.