Los directivos obligan al técnico Pepe Mel a cambiar el sistema para no ser despedido
SEVILLA. Actualizado: GuardarQue el surrealismo es parte intrínseca del mundo del fútbol es algo que muchos ya conocen. Pero lo que han deparado las últimas horas en el entorno del Real Betis roza lo esperpéntico. Las razones por las que en estos momentos Pepe Mel es entrenador de Primera son dos: es caro despedirlo y ha antepuesto el dinero a sus ideales.
Los verdiblancos, en Ley Concursal, no pueden permitirse una indemnización de unos dos millones para después pagar otro sueldo. Mel se va a sentar ante ante Osasuna porque por las diversas cláusulas, destituirlo ahora sería un pico. Además, Navarra es el lugar señalado por los propios dirigentes para ver a los suyos en el pozo de la Segunda.
Pero hay más. El caos judicial que vive la entidad ha desembocado en situaciones que recuerdan etapas pasadas. Bosch, el administrador judicial de las acciones de Lopera, se reunió con Mel para «aconsejarle» que renovara el sistema de juego. «No es lógico cambiar al entrenador, cuando los jugadores van a ser los mismos», aseveró, además de reconocer que ha conminado a Pepe Mel a «usar otra manera de jugar, no tan atacante». Es decir, el dirigente haciendo de entrenador. Y éste lo ha aceptado. Ya se sabe: 'Poderoso caballero es don dinero'.