Una feria del libro en Alameda Cristina para hacer frente a la caída de ventas

La feria del libro antiguo vuelve a captar las miradas de los más curiosos por decimotercera edición en Jerez. A pesar de la crisis, la Alameda Cristina estaba concurrida durante la mañana de ayer y todos los transeúnte se detenían a hojear las páginas de reliquias recuperadas, láminas y fotografías encuadernadas, novelas, poesía, y clásicos que presumían de precios sumamente asequibles.

Juan Enrique González, coordinador de la feria del libro antiguo, no es pesimista ante la crisis y alude a las ventas más recurrentes como «la novela contemporánea, histórica, pictórica, clásica, lectura en inglés», entre otras, aunque echa de menos manuales más académicos y libros especializados .

Con una acogida popular «estupenda», los usuarios siguen prefiriendo el libro tradicional al electrónico, sobre todo, entre los más mayores. José María Alonso, que ofrece todo un surtido de verdaderas antiguallas procedentes de Valladolid, comenta que el interés en el consumo del libro se basa en un «orden de preferencia» y afirma que con la crisis «han decaído las ventas» pero se siguen manteniendo fieles aquellos «amantes de la lectura tradicional».