ESPAÑA

El PSOE cierra filas en defensa de Blanco, pero el PSC pide explicaciones

La cúpula popular exige la dimisión inmediata del ministro salpicado por acusaciones de corrupción y su exclusión de las listas

MADRID / BARCELONA. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El PSOE y el Gobierno mantienen su apoyo intacto a José Blanco y descartan que el ministro vaya a dimitir. Ni el partido ni el Ejecutivo dan crédito a la sucesión de filtraciones que insinúan que la petición de una juez de Lugo al Tribunal Supremo para que el titular de Fomento sea investigado por tráfico de influencias y cohecho se documenta con grabaciones y mensajes que pueden suponer indicios sólidos en su contra.

Socialistas y compañeros de Blanco en el Consejo de Ministros insisten en tres mensajes. Que el responsable de Fomento no ha incurrido en los episodios de corrupción que le imputa el empresario Jorge Dorribo, que el ministro no va a abandonar el Gobierno ni va salir de la lista al Congreso por Lugo, y que todo lo publicado contra el número dos socialista no es más que una campaña orquestada contra él para dañar al PSOE durante la campaña electoral. Estos mensajes fueron ayer reiterados por Alfredo Pérez Rubalcaba, por su jefa de campaña, Elena Valenciano, y por el ministro de Presidencia, Ramón Jáuregui, entre otros.

Sin embargo, en el PSC no se respira la misma unanimidad. Al secretario de Organización de los socialistas catalanes, José Zaragoza, no le han gustado lo más mínimo los supuestos favores realizados por Blanco para que la empresa Azkar pudiese contar con una nave en el aeropuerto del Barcelona, según las informaciones del diario 'El Mundo'. Aunque el dirigente del PSC cree que es una maniobra para reventar la campaña, considera que el ministro «debería dar explicaciones».

El alcalde de Sant Boi de Llobregat, a quien supuestamente llamó Blanco para que agilizase la licencia de instalación de la nave, negó haber hablado con el ministro ni haber recibido estas presiones y aclaró que la concesión de la licencia fue incluso más lenta de lo habitual. La Agencia de Seguridad Aérea, dependiente de Fomento, negó también en una nota trato de favor a Azkar y aclaró que la instalación de la nave se había autorizado tras cumplir todos los requisitos legales y recibir cuatro informes que garantizaban que no causa problemas de seguridad u operativos en el recinto aeroportuario.

El PP, por su parte, redobló ayer la presión sobre Blanco y exigió su dimisión inmediata y sus explicaciones, así como su expulsión de las listas al Congreso. Carlos Floriano, uno de sus portavoces, dijo que todo indica que su responsabilidad política es «innegable».