El Consistorio aprueba medidas para hacer de Hacienda un fortín

La obsesión por lo ocurrido en la caja municipal, tras el supuesto robo de 7,8 millones de euros, así como por el despilfarro existente en anteriores legislaturas pesa a la hora de tomar medidas económicas. De hecho, desde el Ayuntamiento se continúa blindando a la Delegación de Hacienda hasta convertirla en un fortín en le que sea complicado que se escape un euro sin supervisión de los mandos. El pleno municipal de ayer volvió a aprobar algunas cuestiones que buscan precisamente evitar la fuga de dinero, ya sea por medio de un desfalco o por falta de previsión.

De esta manera, el actual equipo de Gobierno sacó sin dificultad adelante la Oficina de Compras y Control del Gasto que centralizará todas las actuaciones referentes a contrataciones ya sea de grandes obras o la adquisición de pequeños artículo bajo un protocolo de buscar tres ofertas para elegir aquella que presente mejores condiciones para el servicio.

La otra medidas fue más discutida y se trató de la creación de la figura del viceinterventor. Hace un año precisamente que la propuesta fue rechazada después de varios debates en torno a su necesidad y ayer al fin salió adelante. Sin embargo, hubo partidos como el caso del PSOE o de Izquierda Unida que sin entrar en la cuestión de necesidad sí mostraron sus dudas ante la urgencia de que se realicen otras contrataciones de cara a mejorar el personal municipal, ya sea en el caso de porteros de colegio o de nuevos policías.