
«Espero que absuelvan a César»
Marta Domínguez, aún sospechosa de dopaje y de delito fiscal, asegura que no le importa «lo que piense la gente»
MADRID. Actualizado: GuardarAbsuelta de tráfico de productos prohibidos, pero aún sospechosa de haberse dopado e incurrir en un delito fiscal, Marta Domínguez volvió a proclamar este jueves su inocencia y expresó su deseo de continuar trabajando con su entrenador, César Pérez, imputado por presuntamente suministrar a la atleta palentina hormona de crecimiento y EPO, entre otras sustancias, «conforme a un plan de dopaje cíclico». Cinco meses después de haber dado a luz a su primer hijo, la campeona del mundo de 3.000 metros obstáculos que se prepara para los Juegos de Londres llegó a comentar que «si no se hubiera levantado el secreto de sumario de la 'operación Galgo' seguramente nadie se hubiera enterado de nada» y, mientras continúa la investigación judicial sobre su técnico, espera «que César Pérez sea también exculpado y todo quede en un mal sueño».
A Marta no le preocupa que su nombre haya quedado manchado, y todavía no esté limpio. «Lo que piense la gente no nos importa, porque todo lo que se ha dicho se ha demostrado que era mentira», aseguró en su primera comparecencia pública tras haber sido madre, para presentar la carrera Divina Pastora de Madrid, de 10 kilómetros, en la que reaparecerá el próximo día 30. Sin embargo, la juez que instruye la 'operación Galgo' mantiene abierta la causa contra César Pérez.
«No me sorprende que no se haya sobreseído todavía la imputación contra César, porque los temas del juzgado van muy despacio. Conmigo solo había que analizar dos cosas, han pasado ya diez meses, y no se ha cerrado el tema fiscal», reconoció la palentina, exculpada de traficar con sustancias dopantes y suministrar fármacos sin receta médica a su liebre (Eduardo Polo), pero aún en el punto de mira de Hacienda por sus cuentas en Andorra y Mónaco. «A mí no me ha dejado huella la 'operación Galgo', porque no he hecho nada malo", aseguró, después de recordar el cambio de rumbo que tomó la instrucción de la trama de dopaje: «Desde el 9 de diciembre -cuando fue detenida por la Guardia Civil- yo era una persona malísima, la peor, pero el juzgado ha dicho que estoy exculpada y con César Pérez espero que pase lo mismo», insistió.
Dio a entender Marta que durante los últimos meses ha continuando entrenando a las órdenes de su técnico, y ni siquiera descartó mantener su relación con vistas a los Juegos Olímpicos. «No sé si seguirá siendo mi técnico, pero espero que levanten lo antes posible su causa y pueda seguir con él. Habrá que esperar a ver qué ocurre», apuntó enigmática la atleta, que se presentó muy sonriente ante las cámaras pero cambió a un semblante muy serio cuando se le formularon preguntas sobre dopaje. «Se ha hablado mucho sin saber», lamentó la fondista candidata ahora del PP al Senado por Palencia.