Piden que la Audiencia investigue un caso de torturas
Un belga de origen melillense extraditado a Marruecos niega su presunta vinculación a redes yihadistas
MADRID. Actualizado: GuardarLa defensa de Ali Aarrás, el ciudadano belga de origen melillense extraditado a Marruecos por su presunta vinculación con redes yihadistas, anunció que interpondrá ante la Audiencia Nacional una denuncia para que investigue las presuntas torturas que su patrocinado dice haber recibido en ese país. En rueda de prensa, el abogado Nayib Mohamed informó de que denunciará ante la Audiencia Nacional esas presuntas torturas y secuelas para que se abra una investigación y envíe a Marruecos a un grupo de personas competentes o diplomáticos que supervisen el estado de salud en general de Aarrás.
Por su parte, la Plataforma Pro Ali Aarrás, en la que también interviene el abogado, ha iniciado acciones para poner esta situación en conocimiento del Comité de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y el Comité contra la Tortura para que investigue y compruebe si ha existido esta presunta tortura y sus consecuencias, así como los posibles responsables de los hechos denunciados.
El juicio a Aarras como sospechoso de pertenecer a una célula terrorista, quedó ayer visto para sentencia, que se leerá el próximo 27 de octubre, en la población de Salé, cercana a Rabat.
Aarras, de 49 años, fue extraditado por España a Marruecos el pasado 21 de diciembre, y si es encontrado culpable, se arriesga a una pena máxima de 30 años de cárcel por sus supuestos vínculos con el 'Movimiento de los muyahidines del Magreb' y su presunta implicación con los atentados del 16 de mayo de 2003 en Casablanca, que causaron la muerte de 45 personas, algunas de ellas de origen español.
En la sesión de ayer, la última en la que Aarras tuvo derecho a la palabra, fue interrogado por el juez, el fiscal y la defensa, y negó toda vinculación con ese grupo terrorista.