Economia

La recapitalización de la banca se abre camino en Europa

Merkel anuncia que está «preparada» para inyectar dinero al sector y disipar dudas surgidas por su exposición a la deuda griega

BRUSELAS. Actualizado: Guardar
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Angela Merkel despejó ayer el camino para una recapitalización global de los bancos en Europa. En una intensa jornada de reuniones en Bruselas, la canciller germana anunció que su país está «preparado» para volver a inyectar dinero al sector. A diferencia de lo ocurrido tras el 'crash' de 2008, la medida estaría enfocada a estabilizar las entidades más castigadas en los mercados por su exposición a la deuda griega. La decisión de Merkel llega tras semanas de presiones de EE UU y el FMI para que la UE blinde a la banca y disipe cualquier riesgo de cataclismo financiero.

La mandataria germana, que compareció en Bruselas junto a José Manuel Durao Barroso, llamó a sus socios a actuar con «rapidez». A su juicio, no hay tiempo que perder si todos los miembros de la UE consideran que «los bancos no están suficientemente capitalizados». «Alemania está preparada para avanzar», agregó. La canciller se declaró incluso dispuesta a tomar una decisión en la próxima cumbre comunitaria los días 17 y 18 de este mes.

Pese a su tono apremiante, Merkel también dejó clara su estrategia. La jefa del Gobierno alemán insistió en que primero deben establecerse unos «criterios» para llevar a cabo la recapitalización. Estos parámetros, que señalarían los bancos que recibirían el dinero, deberían ser acordados por «los expertos» y no dejarse en manos de los distintos ejecutivos. Aunque todo el sector financiero europeo está fuertemente interconectado, las entidades más expuestas a la deuda helena son, además de las griegas, las francesas y alemanas.

El paso al frente de Merkel se produce apenas un día después de que la crisis helena se cobrara su primera víctima bancaria. La entidad francobelga Dexia se encamina hacia su segundo rescate tras desplomarse en la bolsa. La compañía, ya auxiliada por París y Bruselas en 2008, se ha derrumbado por su importante cartera de bonos helenos (3.500 millones de euros) e italianos (15.000 millones). En principio, Dexia será fragmentado y podría transferir sus inversiones tóxicas a una cartera especial.

Margen de seguridad

La caída de la entidad francobelga coincidió con la cita mensual de los ministros europeos de Economía celebrada el lunes y el martes. Los responsables de Finanzas optaron por la cautela en sus declaraciones, pero ayer se conoció que estudian un plan conjunto para respaldar a la banca. «El capital de los bancos debe ser reforzado para que cuenten con unos márgenes de seguridad adicionales y se reduzca la incertidumbre», subrayó el comisario de Economía, Olli Rehn, en referencia a los descalabros que ha sufrido el sector en los parqués en las últimas semanas.

La opción de las recapitalizaciones empieza a abrirse paso en la UE tras un intenso fuego cruzado con EE UU. Tanto el Gobierno norteamericano como el FMI habían reclamado a los socios comunitarios que intervinieran en favor de sus bancos. Merkel no pasó por alto estas tensiones en su intervención. La canciller subrayó la importancia de una «comunicación adecuada». «Solo así lograremos los resultados que necesitamos en lugar de declaraciones críticas», apostilló.

Horas antes de que Merkel se pronunciara sobre el sector financiero, el director del FMI en Europa, el portugués Antonio Borges, había vuelto a insistir en la necesidad de las recapitalizaciones. Según sus estimaciones, se requieren entre 100.000 y 200.000 millones para reforzar el sector, unas cantidades «muy, muy pequeñas si se comparan con el tamaño de los mercados de capitales en Europa». La canciller recibe hoy a la directora gerente del Fondo, Christine Lagarde, y al presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, para analizar los distintos frentes de la crisis.

A la espera de este encuentro en Berlín, el FMI mantuvo la presión sobre Europa no solo en la salud de los bancos. En el informe sobre la situación del continente divulgado por Borges, el organismo también llamó la atención sobre los tipos de interés. De acuerdo con su análisis, el BCE debería optar en su reunión por una rebaja del precio del dinero -situado en el 1,5%- para apuntalar el crecimiento.

Pese a las advertencias del organismo internacional, los mercados se quedaron con la apuesta alemana. Aupadas por los bancos, las principales bolsas del continente experimentaron fuertes subidas con Fráncfort (4,91%) y París (4,33%) a la cabeza. El Ibex-35 cerró con fuerte ascenso del 3,06%.