«No hay derecho al maltrato que hemos recibido los alcaldes en el Parlamento andaluz»
JEREZ. Actualizado: GuardarAunque muchos ven a la alcaldesa en un puesto importante al Congreso, ella asegura que ni se lo plantea: «Son decisiones que no toma uno sino el partido». Eso sí, critica el «maltrato que han recibido los alcaldes en el Parlamento de Andalucía».
-Las quinielas la sitúan en uno de los tres primeros puestos de la lista al Congreso por la provincia...
-No, no es algo que ahora mismo yo me plantee ni es algo que me preocupe. Pero sí es verdad que no hay derecho al maltrato que hemos recibido los alcaldes en el Parlamento de Andalucía por parte del gobierno socialista. Han hecho trampa y un pucherazo electoral por anticipado en toda regla. Demuestran que tienen miedo ante el hecho de que pueden perder las autonómicas. Lo que no es lógico es que el PSOE haya favorecido que etarras como los de Bildu estén en los ayuntamientos del País Vasco y en cambio veten que los alcaldes del PP puedan ser diputados autonómicos. Cuando los ciudadanos votaron el 22 de mayo al equipo del PP, lo hicieron sabiendo que María José García-Pelayo era y es diputada autonómica.
-¿En qué ganarán los jerezanos si Rajoy y Arenas llegan al poder?
-Creo que en todo. Ya se ha notado en la Diputación provincial. El hecho de que en la legislatura anterior lo que se ha llamado la alineación de astros no haya sido bueno no quiere decir que no sea beneficioso para Jerez. La alineación es acertada, lo que no eran acertadas eran las siglas políticas. El hecho de poder ir de la mano política y de gestión de la Junta y del Gobierno puede ser un balón de oxígeno inestimable para la ciudad.
-¿Qué proyectos importantes se marca el PP para la ciudad?
-Todos son importantes. No dejamos de lado ninguna de las inversiones anunciadas por el gobierno anterior. Rescataremos el proyecto de la Ciudad de la Justicia y la Ciudad del Flamenco, así como otras inversiones. Y también vamos a impulsar otros como el Palacio de Congresos y la terminal de autobuses. Y luego está ese edificio administrativo en el que pretendemos concentrar las delegaciones sin atención directa al público.