RUBALCABA PIDE MÁS IMPUESTOS
El programa socialista para el 20-N fijará en 2028 el fin del uso de la energía nuclear El candidato del PSOE subirá la fiscalidad del alcohol y el tabaco para financiar mejor la sanidad pública
Actualizado: GuardarLa cuadratura del círculo pasaba por aumentar los impuestos sobre el tabaco y alcohol. Alfredo Pérez Rubalcaba había prometido que ayer explicaría con pelos y señales la fórmula con la que pretende acometer un duro ajuste del gasto en 2012 sin cruzar 'líneas rojas' del Estado del bienestar. La Conferencia Política que el PSOE celebra este fin de semana en Madrid sirvió para conocer sus cálculos, pero solo de forma parcial. El candidato socialista se limitó a ofrecer una estrategia para financiar la deficitaria sanidad pública, «la joya de la corona». Nada dijo del resto de servicios sociales.
Dicen en la dirección del partido socialista que hay que ir poco a poco y que aún tendrán tiempo para ir desgranando sus planes de aquí al 20 de noviembre a fin de que los ciudadanos puedan conocerlos y asimilarlos. Saben que hay un electorado ávido de soluciones de izquierdas al que es imperativo llegar para evitar la hecatombe electoral que pronostican las encuestas. Y se reservan su derecho a controlar la presentación de los platos fuertes de su futuro programa electoral, que será aprobado el próximo sábado. Pero el cónclave de ayer sirvió para adelantar algunas pistas.
Financiación del sistema sanitario
Impuestos y recentralizaciones
Es difícil saber a cuánto asciende la deuda del sistema sanitario español. Los cálculos más optimistas hablan de más de 9.000 millones de euros, los más pesimistas la sitúan en torno a los 15.000 millones. Alfredo Pérez Rubalcaba dio ayer por bueno que se acerca a los 12.000 millones, pero aseguró que hay manera de hacerle frente. Su estrategia pasa por subir impuestos, mejorar la gestión y encontrar la forma de que las comunidades destinen parte de los recursos que reciben del Estado a cubrir los gastos que genera la prestación de este servicio (un propósito para el que no existe fórmula legal).
El candidato socialista aseveró que el año próximo las autonomías recibirán gracias al nuevo sistema de financiación 8.000 millones de euros más que en el presente ejercicio, aunque en Hacienda no confirman la cifra. De ellos, defendió, al menos 3.000 millones deberían destinarse a pagar lo que se debe a proveedores de alta tecnología y medicamentos. «Así -arguyó- en cuatro años habríamos acabado con la deuda acumulada».
A aquellos que deseen pagar «a más velocidad» se les ofrecerían además unas líneas de crédito del Instituto de Crédito Oficial (ICO). Pero aún hay otro problema y es que la sanidad arrastra un déficit estructural, es decir, que cada año consume más recursos de los disponibles en las cuentas autonómicas.
Rubalcaba defendió que durante este Gobierno ya se ha resuelto una parte del problema al obligar a los médicos a recetar por principio activo y las farmacias a vender genéricos (mucho más baratos que los medicamentos con marca). Pero admitió que aún habría que conseguir 2.000 millones de euros más, una cifra de nuevo algo difusa. ¿De dónde saldrían?, de una subida del 10% en el impuesto sobre el tabaco y el alcohol, sin incluir vino y cerveza.
Por esa vía, el candidato del PSOE ve factible recaudar 1.000 millones de euros más. La última subida, realizada en diciembre del año pasado, no fue ni de lejos tan eficaz.
Los 1.000 millones de euros restantes tendrían que llegar con la recuperación de un extinto impuesto sobre las primas de seguro de las aseguradoras privadas y del cobro efectivo a terceros (mutuas de accidentes laborales o deportivos y países de la UE cuyos ciudadanos son atendidos en España) que aprovechan la sanidad pública.
Y aún faltaría algo. «Un sistema descentralizado tiene sus ventajas pero también sus inconvenientes -apuntó Rubalcaba- hay cosas que se pueden recentralizar». Ya se ha hecho con la central de compra de medicamentos, pero habría que profundizar, según su criterio, en ese campo.
Políticas de igualdad
Consejeras por ley
No hay gran cónclave socialista sin un guiño a las mujeres y la Conferencia Política no fue una excepción. El líder de facto del PSOE prometió que si gana las elecciones volverá a cambiar la ley de igualdad para que las empresas privadas estén obligadas a incorporar mujeres a sus consejos de administración.
La normativa actual, aprobada hace cuatro años, solo invita a las empresas a «procurar» que haya una presencia equilibrada de hombres y mujeres en estos órganos de manera que, en el plazo de ocho años, la proporción sea como mínimo 60%-40%. Pero, según Rubalcaba, en los últimos años no se ha avanzado nada.
A este gesto, el candidato sumó otro. Varias mujeres se han quejado de que en esta ocasión su presencia en puestos de salida en las listas electorales es menor que en otras convocatorias. La dirección federal decide el viernes sobre las propuestas enviadas por las federaciones, pero el candidato ya prometió: «Vamos a dar una vueltita a las listas; vamos a llevarnos bien».
Sistema electoral
Listas desbloqueadas
El PSOE y el PP unieron sus fuerzas hace tan solo unos meses para tumbar las propuestas de reforma de la ley electoral con las que, fundamentalmente Izquierda Unida y UPyD, querían lograr un modelo más proporcional y participativo. El movimiento del 15-M, que causó no pocos estragos a los socialistas en la campaña de las autonómicas y locales de mayo, ha llevado a Rubalcaba a replantearse su postura. Ahora promete un sistema de listas desbloqueadas en el que los ciudadanos puedan marcar sus preferencias dentro de una candidatura y puedan 'subir' a sus favoritos en la lista planteada por el partido.
Además, está dispuesto a estudiar la creación de una circunscripción nueva para que los españoles en el exterior tengan sus propios representantes, quizá cuatro, aunque solo en el Senado.
Medio ambiente
Fin de la energía nuclear en 2028
Los socialistas están dispuestos a llegar en su próximo programa allá donde las disensiones internas nunca se lo permitieron. Pondrá fecha final al uso de la energía nuclear: 2028. Hasta ahora el PSOE solo hablaba de una desaparición progresiva de los reactores que funcionan en España, pero el accidente de Fukushima supuso un punto de inflexión.
Según explicó la responsable del área económica de la ponencia, Inmaculada Rodríguez Piñero, se propondrá elevar las exigencias de seguridad en los tests de resistencia, más aún conforme se aproxime el final de la vida útil de las centrales. El hueco de la energía nuclear lo cubrirán las renovables.