Rubalcaba cree posible no cruzar 'líneas rojas'
El candidato del PSOE asegura tener la receta para hacer un recorte justo, pero aún no la quiere contar
MADRID. Actualizado: Guardar«Cuadraré las cuentas, se lo aseguro». Alfredo Pérez Rubalcaba se ve capaz de hacer realidad lo que el Fondo Monetario Internacional ve ya prácticamente imposible: que España cumpla su compromiso de reducir el déficit hasta el 4,4% del PIB en 2012. Sostiene, además, que puede hacerlo sin traspasar 'líneas rojas' en materias sensibles como educación, sanidad y servicios sociales. El 'cómo' es aún un misterio que guarda para sí, según dicen en su partido, por razones estratégicas. Este fin de semana el PSOE celebra la Conferencia Política, la que se sentará las bases del programa electoral para el 20 de noviembre y es ahí, apuntan, donde aclarará sus números.
El candidato socialista ha esbozado hasta ahora algunos principios que marcarán su política económica si llegara a la presidencia del Gobierno. Incluso ha lanzado varias propuestas. Pero él mismo reconoció en una rueda de prensa en la sede de su formación que, con lo anunciado, no bastaría para cumplir con el ajuste fiscal que requiere España: unos 16.000 millones de euros, conforme a su estimación. «Faltan parámetros», convino.
Sí ha sido más claro con lo que no hará: «Hay que luchar contra el déficit, pero los derechos no se pueden tocar». Eso se traduce en un compromiso firme de no congelar de nuevo las pensiones y en la promesa de compaginar el control de las cuentas públicas con la consolidación del Estado de Bienestar. Es decir, lo contrario de lo que todos los líderes autonómicos del PSOE en la oposición denunciaron ayer que está haciendo el PP allá donde gobierna para cumplir con el objetivo del 1,3% del déficit; una cifra que en 2012 será más exigente.
Rubalcaba argumentó que las comunidades tienen margen para no tocar pilares sagrados. «Un margen de 8.000 millones de euros más; un dinerito, con perdón», ironizó. La cifra, que corresponde a los ingresos adicionales que deberían recibir en 2012 por la aplicación del nuevo sistema de financiación autonómica, tenía que haber ido consignada en los Presupuestos Generales del Estado para el año próximo, pero tales presupuestos no existen. Habrá prórroga de los de 2011.
Más impuestos
Lo que el líder del PSOE no mencionó es que solo en sanidad las autonomías deben más de 9.000 millones de euros y que el año próximo tienen que empezar a devolver los 18.700 millones que deben a la Administración central por las liquidaciones negativas de los anticipos a cuenta de 2009. Pero de una manera sutil, animó a 'tocar' impuestos: «Las comunidades tienen sus propios ingresos».
Él tiene intención de hacerlo, también con salvedades. Prometió que no subirá las rentas del trabajo. ¿Y las de capital? Hasta la fecha solo ha dicho que «estudiará» cómo meter mano a las SICAV, uno de los instrumentos financieros de los que se sirven las grandes fortunas para 'driblar' al fisco.
Sus recetas para elevar los ingresos son el impuesto para los ricos; una tasa sobre la banca; la agencia contra el fraude fiscal y, quizá (aunque en esto no ha sido claro), una subida en el impuesto de sociedades para grandes empresas. En el lado del gasto, quiere acabar con las diputaciones provinciales lo que, según sus cálculos, supondría un ahorro de 1.000 millones de euros.
No está claro cuánto dinero podrían sumar esas acciones ni si llegarían a tiempo para aliviar las cuentas de 2012. Pero Rubalcaba confía también en el crecimiento económico, que estima entre el 0,8% y el 1% del PIB para este año. «Igual son 5.000 millones de euros», dijo. «¡Ya quisieran las economías europeas crecer como nosotros!».