Absueltas ocho personas a las que se incautó cinco kilos de coca

El Tribunal Supremo ha confirmado la absolución de ocho personas que fueron detenidos en 2006 en Jerez dentro de la llamada 'operación Pollo', en la que se llegaron a incautar cinco kilos de cocaína. Aquella operación fue considerada una de las actuaciones más importantes contra el tráfico de droga llevadas a cabo ese año en la ciudad jerezana. Sin embargo, aquel éxito policial se desmoronó como un castillo de naipes (cuatro años después) durante el juicio. Como suele ser habitual en estos casos, los abogados de la defensa solicitaron que las escuchas telefónicas fueran anuladas, y en esta ocasión la Sección Octava de la Audiencia Provincial en Jerez les dio la razón: consideró que los pinchazos telefónicos (con las que comenzaron las pesquisas) no fueron bien autorizadas por el juez de Instrucción Número 4 de Jerez, por lo que toda la investigación quedaba contaminada. También la droga incautada. Y sin pruebas, los acusados fueron absueltos. Según la sentencia de la Audiencia, el auto judicial que autorizaba aquellas escuchas no estuvo bien justificado. Decía que el juez no expuso «las razones que hacían necesarias la intervención solicitada» y el informe policial que lo acompañaba aportaba «unos datos que no apoyan objetividad alguna, sino opiniones poco fundadas». La Fiscalía de Cádiz recurrió la sentencia, y defendía que el auto judicial sí era suficiente, pero el Tribunal Supremo ha rechazado ahora esta tesis, y considera que «la justificación que dio la Audiencia no incumplió la tutela judicial». La investigación policial comenzó en el verano de 2006 en torno a uno de los ocho acusados que han sido absueltos (defendido por el letrado José Álvarez), cuyo teléfono fue el primero en ser pinchado. La Policía identificó después a cuatro familiares, considerados por la Fiscalía igualmente como cabecillas de la supuesta red de narcotráfico. A través de sus conversaciones se detuvo a una ciudadana marroquí (también absuelta) a la que la Policía decomisó siete bellotas de hachís. Entre los acusados absueltos también hay cuatro vecinos de Talavera de la Reina (Toledo), a los que se les incautaron 4,5 kilos de cocaína de una gran pureza, que supuestamente iban dirigidos a la banda de Jerez. En el registro domiciliario de uno de los jerezanos encausados, se encontraron 130 gramos de cocaína y 92.115 euros en efectivo. Todo quedó invalidado por la Audiencia por no realizarse las escuchas de manera correcta.