Unas gamberradas que salen caras

Un equipo, puesto en marcha por la Delegación de Medio Ambiente, volvió a realizar ayer labores de limpieza en numerosas fachadas de entidades en las calles Larga y Lancería. Es el segundo lunes consecutivo que se tiene que montar este dispositivo, integrado por dos operarios y un vehículo con productos apropiados, con un coste para «los bolsillos de todos los ciudadanos» de 2.530 euros.

El dispositivo es de dos jornadas de trabajo de cuatro horas durante las jornadas de ayer y de hoy. Comienza funcionar a las 6.30 horas de la mañana y finaliza sobre las 10.30 para no molestar a los comerciantes, que ya tienen abiertas sus puertas, y a los viandantes. La pasada semana por las mismas circunstancias se tuvo que montar el mismo operativo. Las labores que se realizan consisten en el borrado de la pintada con un líquido especial y la limpieza con agua caliente a presión de la fachada.

Desde la Delegación de Medio Ambiente se solicitaba ayer la colaboración de ciudadanos, asociaciones y colectivos para que no vuelvan a registrarse este tipo de incidencias «no solo por la mala imagen que ofrece el centro de la ciudad, si no por el alto coste para todos de la limpieza de estos edificios históricos».

Medio Ambiente apela también a la concienciación ciudadana para erradicar graffitis y pintadas y con ello ayudar a mantener limpia la ciudad y respetar el mobiliario urbano. «Por parte municipal se está realizando un gran esfuerzo para poner en marcha un nuevo plan limpieza, pero evidentemente, el éxito del mismo también dependerá de esta colaboración y concienciación», manifestó la delegada de Medio Ambiente, Felisa Rosado que también señaló que «para realizar cualquier tipo de reivindicación no se tiene que ensuciar el patrimonio histórico ni el mobiliario urbano».

Llamamiento

Por todo ello, la delegada municipal de Medio Ambiente hace un nuevo llamamiento a la ciudadanía jerezana para erradicar este problema. «Es importante que se tome conciencia de la importancia que tiene para la ciudad permanecer limpia y sin pintadas».

Las ordenanzas municipales, en su apartado de Protección del Medio Ambiente en el término municipal de Jerez, recogen la prohibición, entre otras, de colocar carteles y/o realizar pintadas en lugares y emplazamientos no autorizados. Las infracciones podrán ser sancionadas con multas de hasta 600 euros. Por otro lado, realizar una pintada o un graffiti sobre un monumento o un edificio que esté declarado Bien de Interés Cultural o que disponga de protección provisional al haberse incoado ya el expediente para la protección de los mismos es ya considerado un delito penal.