Los trabajadores de Urbanos Amarillos reciben la visita del obispo en su segundo día de encierro

Tras pasar la noche en el templo y acompañados de familiares y amigos, sin olvidar el respaldo del sindicato CC OO, los trabajadores se lamentaban de la situación que están sufriendo en su segunda jornada de encierro, medida que mantendrán hasta el sábado.

La plantilla pasó la noche en los salones del convento. El portavoz del comité, Ángel Morales, explicaba por la mañana que «han permanecido en la iglesia unas 25 personas, algunas en la nave central y otras en un cuartito». Con la llegada del día, sin embargo, ninguna novedad aparecía en el frente: «Todo parece indicar que terminaremos aquí la sexta semana de huelga, que no desconvocaremos hasta no cobrar todas las nóminas».

El portavoz del comité agradece la solidaridad mostrada tanto por los franciscanos como por los trabajadores de Onda Jerez, que pese a haber percibido solo 450 euros han ayudado a recaudar fondos para la plantilla de los autobuses.

«La situación es lamentable y está perjudicando a todos: usuarios, empleados, comerciantes...», se queja el portavoz del comité. Por ello, si no se arregla de aquí al sábado, «vamos a plantear acciones más contundentes» en aras de una solución «definitiva».

Ayer la plantilla recibió una visita especial. El obispo diocesano de Asidonia-Jerez, monseñor José Mazuelos, les trasladó su apoyo. Mazuelos les visitó como «portavoz de la cercanía de la Iglesia, a la luz de su doctrina social», para mostrarles su respaldo por «las injusticias que en estos tiempos de crisis sufren diversos sectores laborales».