'PA CAGARSE'

Los niños de hoy en día nacen con la crisis debajo del brazo y ahora, para colmo, cuando ingresen en el hospital, lo notarán aún más. A alguien se le ha ocurrido la genial idea de reducir costes sanitarios recortando la entrega de pañales a sus padres. Debe ser un genio de la economía o alguien que entiende mucho de pelas. Lo cierto es que 'la ha cagao', nunca mejor dicho. Quien pone en marcha esta medida es Tomás Aguirre, jefe de la Unidad de Gestión Clínica Pediátrica del Hospital Puerta del Mar, que incluye las Urgencias Pediátricas, Neonatología y UCI Pediátrica, quien fuera en su día jefazo del SAS en Sevilla y que tiene como premio a los servicios prestados el puesto en Cádiz, si se tiene en cuenta que también es el jefe de Pediatría en el Hospital de Puerto Real, plaza que ocupa por méritos propios al ostentar cátedra en la UCA. Y claro, en los tiempos que corren hay que barrer para casa, sobre todo si se tiene en cuenta que no se sabe cuánto tiempo va a durar el chollo de los incentivos, algo que nunca he entendido, y menos ahora con los tiempos que corren. Para los que sean profanos en este tema explicaré que cada cierto tiempo las personas que integran estas modernas unidades de gestión reciben una importante paguita por reducir gastos en su unidad, sea de la forma que sea, en personal o en material. No digo que haya médicos o personal sanitario que no se merezcan más de un sobresueldo, sobretodo los que se parten la cara por sus enfermos mientras aguantan que un compañero de la cuerda del que manda en el SAS les dé órdenes con el fonendo de adorno colgado al cuello, simplemente por ahorrar un dinero que luego cobra en incentivos. Insisto, lo de los pañales ha sido una cagada. Si alguien pide de más será porque quiere ahorrarse unos euros de su triste sueldo al mes, si es que lo tienen. No creo que se vayan a hacer ricos con ello, ni que sea comparable a los 14.771,75 euros que cobró en mayo el jefe de la Unidad de Gestión Clínica de Pediatría en concepto de incentivos, aparte de su sueldo en el hospital Puerta del Mar, porque no quiero pensar que también cobre otro por la jefatura de Pediatría en Puerto Real. Supongo que con este dinerito -en total, su unidad de gestión se repartió 70.110,35 euros- pagarían cada uno de su bolsillo la fiesta que organizaron en julio en un cortijo de Benalup. 'Pa cagarse'. La próxima semana seguiremos con el 'wikiliki dersá': la bolsa, contrataciones en la plataforma de Zona Franca, miedito por las elecciones andaluzas....

Para no olvidar

Un día como hoy hace diez años, a eso de las tres de la tarde andaba yo por La Marea con mi hija de cuatro años. Estaba de vacaciones y allí siempre me he encontrado como en casa. Están mis camareros de toda la vida, Pepe y Joaquín, los del Barril, y otros profesionales de la hostelería a los que no me hace falta hacerles la pelota. Cuento esto para situarme en aquel día que no quiero olvidar, cuando todos miramos a la tele y escuchamos a Matías Prats relatar cómo un segundo avión había impactado en las Torres Gemelas. Ahí se paró el mundo, era la guerra en vivo y en directo, como nunca la habíamos visto. Hoy escucho los avioncitos sobrevolar sobre el cielo y aún me echo a temblar. No me gusta nada. Pero la vida sigue. Cuando llegamos ese día a casa mi hija me dijo: «Mamá, llama a tu periódico para que salven a los bomberos que no pueden salir de su coche». Sigue tan adicta a los 'telediarios' como aquel día. Ahora, una década después, cuando hablamos de lo que ocurrió aquel día piensa en esos héroes atrapados como un recuerdo de su infancia, imborrable. Y yo quiero que sea así, para no olvidar.