El nuevo puente del tranvía estará listo antes de que acabe el año

Las obras del tranvía continúan adelante a pesar de las diferentes resoluciones judiciales. De hecho, se espera que durante las próximas semanas lleguen a la ciudad los tableros que faltan para completar el nuevo puente de la variante por donde se desviará el tráfico de la ciudad y transcurrirá el nuevo medio de transporte.

En la zona se han agilizado los trabajos e incluso la colocación de grúas para acometer la actuación. La intención es que los vehículos puedan circular por el lugar antes de que finalice el año. Esto permitiría liberar de tránsito rodad al puente Zuazo en unas fechas en las que se espera poder comenzar los trabajos de restauración del monumento. Hay que recordar que se está elaborando el proyecto y que estará listo en dos meses a la espera de la licitación de la reforma.

De esta forma se dan nuevos pasos de cara a desbloquear un proyecto que tienen muy preocupado al actual alcalde de la ciudad, José Loaiza, ya que deja estancada a la principal arteria del municipio. Con el adelanto en esta actuación se pretende adecuar los accesos a la necesidad de la localidad si bien en la zona de la fuente de la Comunicación la imagen parece haberse quedado fija en el tiempo ya que apenas modificaciones, mientras que en su zona las catenarias continúan sin funcionar, por lo que la única luz que hay en las calles es la que ofrece los palos de obra.

En las alcantarillas

Por otro lado, la empresa adjudicataria de las obras del tranvía también se ha propuesto acabar con uno de los problemas más denunciados durante el presente año por la mayoría de ciudadanos y hosteleros. El mal olor en la calle Real ha acompañado a los viandantes y veraneantes durante toda la época estival. Para evitarlo se han colocado sifones en la práctica totalidad de los husillos de las zonas más afectadas (principalmente del centro). Por el momento la medida parece haber surtido efecto y así se demuestra con la satisfacción de los hosteleros.

Pero, además se está aprovechando para reponer gran parte de las losas que se encontraban en mal estado y que plantean la duda de que vayan a aguantar el paso del nuevo medio de transporte, ya que se resienten sobre todo en aquellas zonas con paso continuado de vehículos.

El único lugar que permanece con las vallas puestas en todo San Fernando es la zona de Montañeses de La Isla, que parece ser castigada por los recursos interpuesto a consecuencia de las expropiaciones. Los vecinos están muy molestos y ya han amagado con varias protestas al respecto que finalmente no se han llevado a cabo. Los que miran con expectación lo que ocurre son los expropiados que estudian la situación para volver a acudir a la Justicia y evitar que la ora siga mientras no se llegue a ningún tipo de acuerdo con los afectados, a los que la Justicia les dio la razón.