Envian a prisión al anciano acusado de abusos sexuales a sus alumnas

El juez ha enviado a prisión preventiva sin fianza a José Luis G. R.., el marino jubilado de 71 años que fue detenido el miércoles por la Policía Nacional en El Puerto por presuntos abusos sexuales a siete menores, a las que daba clases particulares en su propia casa. Las declaraciones de las niñas, de entre 12 y 15 años, han sido suficientes para que el juez instructor ordene la prisión incondicional. José Luis G. R, en cambio, se negó a declarar cuando fue trasladado a los juzgados de El Puerto a última hora de la mañana, desde donde fue trasladado a una celda de aislamiento en prisión. Por el momento continúan las investigaciones para esclarecer si hay más víctimas y el juez ha decretado el secreto de sumario.

La detención fue efectuada a raíz de la denuncia presentada por la madre de una de las alumnas, que desveló los abusos después de varios meses de silencio. Según lo declarado por las menores, José Luis G. R. tenía una actitud inadecuada con las niñas durante las clases de matemáticas que les daba en su casa de la urbanización portuense El Águila, en la zona de Costa Oeste. El profesor les refería expresiones impropias y se propasaba con ellas con unas formas de «sobón», según explicaban ayer fuentes afectadas, que denunciaban que se atacaba sobre todo a las más pequeñas.

Según la Policía, el detenido aprovechaba su condición de docente y su avanzada edad, para ganarse supuestamente la confianza de las menores a las que daba clase, y para cometer presuntos abusos sexuales «con total impunidad». Al parecer, los varones que también asistían a estas lecciones de recuperación durante el verano no fueron objeto de esos presuntos tocamientos y, de hecho, ninguno lo ha denunciado. La detención se desató después de que una de las niñas contara en su casa lo que sucedía durante las clases.

Sus padres se pusieron en contacto los de otras alumnas, que a su vez les preguntaron a sus hijas si era verdad que aquel profesor, de 71 años, se propasaba con ellas. Todas coincidieron en la misma versión, así que las familias decidieron denunciarlo a la Policía Nacional.

La detención se produjo el pasado miércoles en su domicilio. Al día siguiente, tras pasar la noche en los calabozos de la comisaría portuense, José Luis G. R. fue acompañado por los agentes a su casa, ubicada en la calle Milano de la citada urbanización, para el registro domiciliario por parte de los agentes. La Policía le ha incautado dos ordenadores personales y numerosas grabaciones de voz que están siendo analizadas, ya que, al parecer, el detenido disponía en la habitación donde impartía las clases de una videocámara. Tras pasar otra noche en los calabozos, ayer fue trasladado al Juzgado número 4 de El Puerto, que instruye el caso, ya que estaba a punto de vencer el plazo legal de detención de 72 horas. Ante la disyuntiva de enviarlo a prisión preventiva o dejarlo en libertad, el juez se decantó por la primera opción ya que consideró suficientemente creíbles las versiones de las menores, quienes prestaron declaración por separado en la comisaría y el juzgado. El detenido se acogió a su derecho a no declarar.

Según fuentes cercanas al caso, el profesor es un marino de alto rango jubilado que había estado destinado en la Base Naval de Rota y que una vez culminada su carrera militar comenzó a dar clases particulares en su casa. Las mismas fuentes aseguran que había sido condenado por los mismos hechos por una sentencia, recurrida ante el Tribunal Supremo.