La niña portuense desaparecida el 30 de julio, hallada por la Policía sana y salva

La niña portuense de de trece años, Angie Corona Padilla, ha sido encontrada «en perfecto estado». Según informaron a LA VOZ fuentes policiales, la menor, que falta de su casa desde el pasado 30 de julio, ya ha sido localizada y está a salvo. Otras fuentes apuntan que Angie fue encontrada el viernes en algún punto de la Comunidad Valenciana, pero estos datos no han sido confirmados por las autoridades que se han encargado de la investigación. Ésta sigue bajo secreto de sumario por orden del juez.

La madre de Angie, Angélica Padilla, también confirmó la buena noticia pero no quiso dar detalles, aunque sí apuntó que saldría de viaje de madrugada. El pasado jueves Angélica aseguró a este medio que aún no sabía nada de su hija, con lo que es probable que la menor fuera encontrada el viernes.

La adolescente se marchó de su casa el último sábado de julio, entre las diez de la noche y la una de la madrugada, aproximadamente. Según los indicios -la niña se llevó ropa, enseres de aseo y algo de dinero- la Policía consideró en primera instancia que se trataba de una fuga voluntaria. La menor mantenía una supuesta relación sentimental con un hombre diez años mayor que ella a la que sus padres, Juan Corona y Angélica Padilla, se oponían. De hecho esta circunstancia quebró la convivencia de la familia en los últimos meses hasta el punto de que intervino la concejalía de Asuntos Sociales de El Puerto porque la niña dijo en su instituto que su madre le había dado un cachete durante una discusión.

27 días sin noticias

En una carta, Angie confesó a una trabajadora social sus intenciones de marcharse y señaló como destino algún lugar de Huelva o Extremadura. Según sus progenitores, durante estas cuatro semanas la niña no se ha puesto en contacto en ningún momento con ellos, ni por vía telefónica ni a través de las redes sociales de Internet, en las que tampoco se ha percibido movimiento alguno. Esta práctica ausencia de datos o pistas sobre su paradero y la falta de información por parte de la Policía en aras de respetar el secreto sumarial causó la desesperación en la familia Corona Padilla, que recorrió diversos puntos de Extremadura, Huelva y Málaga para colocar los carteles con los que ya habían llenado las calles de El Puerto.

Incluso habían iniciado los trámites en los Ayuntamientos de El Puerto y Puerto Real -ciudad en la que residieron hasta hace poco- para convocar sendas manifestaciones de apoyo y llamamiento para que la pequeña diera señales de vida.