Israel acaba con la tregua al matar a un palestino

El primer ataque perpetrado por Israel tras la tregua acordada por las facciones palestinas hace cuatro días para frenar la escalada de tensión se cobró ayer la vida de un destacado miliciano del brazo armado de la Yihad Islámica, según detallaron las autoridades de Tel Aviv. La operación, calificada por el Ejército como un «asesinato selectivo» se produjo en la ciudad de Rafah, al sur de Gaza, al ser bombardeado un vehículo en el que otra persona resultó herida.

En un comunicado, las Fuerzas Armadas hebreas identificaron a la víctima mortal como Ismail Zadi Asmar, «involucrado en el contrabando de armas y que buscaba la ejecución de la actividad terrorista en la península del Sinaí». Los militares precisaron en la nota que el insurgente había operado «recientemente» con elementos que habían intentado «llevar a cabo ataques en la frontera israeloegpicia».

La relativa tranquilidad que imperó desde el alto el fuego aceptado por las facciones palestinas y respetado por Tel Aviv quebró también ayer con el lanzamiento de un cohete contra la ciudad israelí de Ashkelón, al norte de la Franja, que no causó víctimas ni daños materiales, indicaron medios locales. El proyectil cayó en una zona no habitada al sur de la ciudad y se produjo en respuesta al asesinato del combatiente palestino.

Mientras, un informe publicado por el diario 'Al-Masry al-Youm' y basado en las investigaciones de las fuerzas de seguridad de El Cairo apuntó que al menos tres de los doce asaltantes que acabaron con la vida de ocho israelíes en la localidad fronteriza de Eliat eran egipcios. Los tres ciudadanos pertenecían a un grupo militante del extremismo islámico y vestían, en el momento del ataque, trajes marrones similares a los utilizados por el Ejército del país árabe, precisó, por su parte, el diario hebreo 'Haaretz'.