Poemas y rosas para las víctimas del vuelo JK5022 de Spanair
Los familiares de los fallecidos exigen la revisión del informe oficial de la tragedia en el tercer aniversario del accidente
MADRID/LAS PALMAS. Actualizado: GuardarUna lectura de poesías con el telón de fondo de un violonchelo recordó ayer en el aeropuerto de Barajas el accidente de hace tres años del avión de Spanair que se precipitó a tierra mientras intentaba despegar. Murieron 154 personas y 18 resultaron heridas. En Las Palmas de Gran Canaria, de donde eran naturales casi la mitad de los pasajeros del vuelo JK5022, los familiares se reunieron en el monumento del Mirador de los Ausentes para recordar también a sus fallecidos.
En el acto del aeropuerto madrileño, bajo un sol abrasador, los familiares depositaron en el lugar del siniestro, junto a la placa que reza «En algún lugar. siempre en nuestros corazones», un corazón con 154 rosas blancas y 31 ramos con cinco flores idénticas, uno por cada fila de asientos del avión. Los reunidos leyeron poemas arrullados por los acordes de la Suite número 1 para violonchelo de Johann Sebastian Bach, y en medio de muchas lágrimas guardaron un minuto de silencio que concluyó a las 14.24 horas, el momento en que se consumó la tragedia. Después se dispersaron.
Pero además de los homenajes, hubo tiempo para la denuncia. La presidenta de la Asociación de Afectador del vuelo JK5022, Pilar Vera, ofreció una rueda de prensa para reclamar que se modifique el informe de la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil, que depende del Ministerio de Fomento, y que atribuye las principales responsabilidades del siniestro a los pilotos del aparato.
La presidenta de la organización sostuvo que las conclusiones de la investigación oficial «ni siquiera se aproximan» al objetivo de determinar las causas de la tragedia. Se mostró convencida de que los pilotos del avión McDonell Douglas 82 no fueron los responsables del accidente y se negó a que «se cargue sobre su memoria el peso de la tragedia». Pilar Vera señaló que los familiares están resueltos a que se conozca la verdad y para ello han acordado con el sindicato de pilotos Sepla la elaboración de otro informe que esclarezca «con rigor» las razones del accidente.
En Las Palmas, la vicepresidenta de la misma asociación, Margarita Henríquez, señaló en el acto de homenaje que la batalla legal se centra en el juzgado de Madrid para que «salga toda la verdad» de lo ocurrido aquel 20 de agosto. Reclamó asimismo el cambio de la metodología para la investigación de los siniestros aéreos en España porque es ineficiente.
Concluyó su intervención un verso del escritor uruguayo Mario Benedetti dedicado a los familiares de las víctimas y su lucha por establecer la verdad: «No se rindan por favor, no cedan, aunque el frío queme, aunque el miedo muerda, aunque el sol se ponga y se calle el viento».