Los militares acusados de asesinar a Ellacuría se enfrentan a su extradición

Nueve de los veinte militares salvadoreños procesados por la Audiencia Nacional por la matanza de seis jesuitas, entre ellos el padre Ignacio Ellacuría, y dos de sus empleadas se enfrentan a su posible extradición a España.

Los acusados se entregaron de forma voluntaria a la policía militar el domingo tras conocer las órdenes de detención internacional emitidas contra ellos por el juez Eloy Velasco el pasado 30 de mayo. El magistrado les acusa de ocho delitos de asesinato terrorista y uno de lesa humanidad.

Los nueve procesados formaban parte de la cúpula militar de extrema derecha que organizó y perpetró la matanza en la Universidad Centroamericana de El Salvador, en un momento de polarización por el larvado enfrentamiento entre el Gobierno y la guerrilla izquierdista que dejó al menos 75.000 civiles muertos en una década.

Entre los procesados que se han entregado están el exministro de Defensa Nacional, Rafael Humberto Larios, un general y dos coroneles que en la actualidad están retirados. También se pidió la captura del que fuera jefe del Estado Mayor, el general René Emilio Ponce, del que hay indicios de que instigó los crímenes, según el juez. Sin embargo, este falleció el 2 de mayo.

Decisión final

Los procesados se encuentran en una instalación militar al amparo del Ministerio de Defensa, y están a la espera de conocer el veredicto de la Corte Suprema salvadoreña, encargada de decidir si aprueba la extradición de los militares,

Su entrega «voluntaria» ha sorprendido a la sociedad civil salvadoreña. En un comunicado, aquellos rechazaron las acusaciones y criticaron la injerencia de los tribunales españoles en este proceso, que ya fue investigado y juzgado a principios de los noventa, y que acabó con varias condenas que fueron anuladas poco después gracias a una ley de amnistía general.

La abogada querellante, Almudena Bernabé, pidió que los procesados permanezcan retenidos hasta que se conozca la decisión de la Corte Suprema. No obstante, ya surgen voces que aseguran que esta entrega «ha sido arreglada». Por su parte, el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar, dijo el domingo en una misa que la iglesia ya perdonó a los militares y respeta la amnistía, pero también quiere conocer la verdad y «que haya justicia».