Zona Franca y Ayuntamiento plantean a los empresarios el futuro del recinto exterior

La Oficina de Captación de Inversores para el Recinto Exterior de la Zona Franca trabaja ya a pleno rendimiento. Son siete los técnicos, procedentes tanto del Ayuntamiento de Cádiz como del Consorcio Zona Franca, los que están buscando nuevas oportunidades de negocio para el último espacio industrial de la capital gaditana. En sus manos está buena parte de la responsabilidad de aprovechar la única ocasión de la ciudad para no quedarse fuera de los circuitos económicos de las grandes empresas de los principales sectores productivos.

No solo buscan nuevos inversores, sino que ya se han puesto en contacto con todos los propietarios de naves de la Zona Franca, incluidos los públicos, para conocer de primera mano sus planes de futuro y sus necesidades en cuanto a espacios y equipamientos.

La de ayer fue la primera visita realizada a la Oficina por parte de la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, el presidente del Consorcio Zona Franca, José de Mier y el teniente de alcaldesa delegado de Urbanismo y Presidencia del Ayuntamiento, Ignacio Romaní, que conocieron toda la información referente a la actividad del organismo de mano del responsable del mismo, Ernesto Martínez.

La alcaldesa destacó la importancia de la actuación de reorganización que se va a llevar a cabo en los próximos años en la Zona Franca, a la vez que advertía que va a ser un proceso muy laborioso. «Va a ser muy difícil, pero la ciudad va a ser un ejemplo para España y Europa de algo que se va a poner de moda en los próximos años en el urbanismo local, que es la reutilización de espacios. Esta iniciativa va a mostrar como las ciudades pueden rentabilizar al máximo sus recursos públicos y también ser atractivas para los privados», explicó.

Actualmente, el recinto industrial gaditano tiene un 30% de la superficie desocupada, además de estar desaprovechando la mitad de su terreno. Todo esto, según Martínez, lo que ha provocado es que hasta ahora haya sido un lugar con «escaso atractivo económico» para los inversores.

La intención de la Oficina de Inversores es conseguir en la Zona Franca de Cádiz un equipamiento industrial moderno, parecido al nuevo Parque Tecnológico de Málaga, que sea una zona atractiva para la inversión y con capacidad para generar empleo entre los más jóvenes. La alcaldesa habló en este sentido de una generación que «se ha venido preparando en los últimos años, en los que se les ha dicho que el futuro está en las nuevas tecnologías, en la industria de servicios y en las de bienes de consumo y equipos».

Derivado de todo esto, Martínez aseguró que el recinto debe albergar actividades económicas no solo industriales, ya que se corre el riesgo de «que dentro de quince años se puedan deslocalizar de golpe». La alcaldesa de Cádiz dijo que «sería un error dedicar el suelo a una sola actividad, porque dentro de quince o veinte años pasaría como ha ocurrido con Delphi o ahora con Visteon. Son empresas multinacionales que fácilmente llegan y fácilmente se van».

La Oficina ha aprovechado los trabajos previos realizados por el Ayuntamiento y la Zona Franca para actualizar la documentación que describe la situación de cada una de las naves. En estos momentos ya está lista la planimetría que recoge todas las indicaciones del actual Plan General y del que está a punto de aprobarse, y en la que especifica cuáles son las naves de propiedad pública, las de propiedad privada y las zonas destinadas a equipamientos.

Los primeros trabajos, que ya se están adelantando de cara a empezar de inmediato a construir una vez que se apruebe el nuevo PGOU, tienen como objeto las naves de propiedad pública y las de aquellos propietarios que han manifestado su intención de venderlas.

También se cuenta ya con la licencia de obras para la construcción de las naves de realojo, «que servirán de mucho una vez que se empiecen a construir los nuevos equipamientos», especificó Teófila Martínez.