Los trajes de baño de las españolas volvieron a ser muy llamativos. :: EFE
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España logra una medalla de bronce en sincronizada

El joven equipo español solo fue superado por China y Rusia, que logró el metal de oro

SHANGHÁI. Actualizado: Guardar
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El equipo español de natación sincronizada cerró ayer la competición de esta especialidad con su sexta medalla en los Mundiales de Natación de Shanghái , al conseguir el bronce en la final de artística por equipos, con una rutina inspirada en la variedad de la vida marina.

Las españolas, pese a la juventud de su equipo, lograron ayer su quinto bronce de esta competición, que se suma a la plata que Andrea Fuentes consiguió el miércoles en la prueba de solo artístico, de manera que sumaron esta noche 96.090 puntos, 47.860 en la evaluación técnica y 48.230 en la impresión general artística.

Por delante de ellas sólo acabaron el imbatible equipo de Rusia, que se llevó el oro con 98.620 puntos, y la anfitriona China, arropada en casa por un entusiasta estadio, casi lleno, en la piscina principal del Centro Deportivo Oriental de Shanghái , que sumó 96.580 puntos. El ejercicio de Rusia volvió a ser técnicamente imbatible, con las ocho nadadoras sincronizadas con gran precisión y acrobacias de alto riesgo, como un doble salto mortal hacia atrás que si ya es difícil de conseguir en el trampolín, dejó boquiabierto al público de Shanghái por su espectacularidad en medio del ejercicio.

España salió a arrebatarle la plata a China, y aunque finalmente en la puntuación se quedó a poco de conseguirlo, las asiáticas, que montaron una coreografía de inspiración en parte flamenca, basada en la pieza «Asturias» de la «Suite Española» de Isaac Albéniz, presentaron una rutina más conservadora y cauta que las españolas.

Las nadadoras que entrena Ana Tarrés, ataviadas con un bañador decorado con las fauces abiertas de un tiburón y gorros decorados con ojos de plástico que simulaban el cuerpo de un pez, apostaron por un montaje más arriesgado, que sumaba a su creatividad artística una serie de acrobacias muy seguidas una tras otra y muy exigentes.

Desde la piscina hicieron evocar toda la variedad de la vida marina: bancos de peces que cambian de sentido, cangrejos que mueven sus pinzas, tortugas, ranas, delfines, un pulpo gigante que se levanta...