Ref0rma inexorable

El Congreso aprobó ayer la ley de actualización, adecuación y modernización del sistema de Seguridad Social, una de las principales reformas del proyecto socialista, pactada con los empresarios, que llegó al Parlamento hace algo más de seis meses y que el Gobierno ha sacado adelante con el único apoyo de CiU. En virtud de esta nueva ley, que endurece las condiciones de las jubilaciones, los trabajadores que quieran retirarse a los 65 años lo podrán hacer con la pensión íntegra si han cotizado como mínimo 38 años y medio, mientras que la jubilación a los 67 requiere 37 años de cotización. Al igual que durante el primer debate, el Ejecutivo se encontró ayer con la oposición de la mayoría de la Cámara, que consideran la reforma injusta, contraria a los derechos de los trabajadores y solo justificada por la presión de los mercados. La realidad es que la prolongación de la esperanza de vida y otros factores hacían necesaria la adaptación del sistema de pensiones a las condiciones inexorables de sostenibilidad del modelo. Lo triste es que ello no haya podido hacerse en el marco consensuado del pacto de Toledo.