Griñán llama a la unidad del PSOE para luchar «contra las infamias» del PP

Griñán admitió ayer ante los militantes y cuadros de su partido que perdieron las elecciones municipales por la crisis, pero también porque fallaron los mensajes y en algo se debieron haber equivoc ado. El secretario general del PSOE andaluz cree que esto se puede arreglar cara a las próximas elecciones con más «movilización, organización, compromiso y, ante todo, unidad». En el primer comité director del PSOE tras el 22-M, celebrado ayer tarde en un hotel sevillano, Griñán hizo algo de autocrítica, pero también dijo que no hay que llevar «luto» por la derrota, sino convertir esta en una oportunidad. Y sobre todo, dejó una consigna clara: Movilizarse para «atajar las mentiras y combatir las infamias», que achaca al PP, al que acusó de practicar «la ley del embudo», en clara alusión a los recientes rifirrafes por las declaraciones de la renta.

La polémica por el sueldo de Javier Arenas ha dado oxígeno al PSOE y ha fortalecido a Griñán. Esto se vio ayer en el primer cara a cara del líder socialista ante el máximo órgano de su partido después de la primera derrota electoral en Andalucía. Sin mencionar expresamente a Javier Arenas, Griñán manifestó: «No hace falta notario para que los andaluces sepan ya el doble lenguaje, la hipocresía, las mentiras y la falta de escrúpulos de la derecha andaluza».

Para que no cupiera duda de que se estaba refiriendo al PP, agregó: «Sólo quienes se consideran por encima de los demás se excluyen de las reglas de comportamiento que ellos mismos predican, sea en sueldos, sea en incompatibilidades, sea en alianzas políticas, o sea en la consideración de la presunción de inocencia». Unas palabras duras a las que aún añadió: «Sabemos de sobra quiénes son y como se llaman los que han llevado siempre por divisa la ley del embudo».

Con esta consigna, Griñán alentó a los suyos con una receta vieja: Llegar a los ciudadanos por todos los medios, desde las plazas de los pueblos a las redes sociales, pero con una sola voz para que tenga más fuerza. Griñán lanzó un eslogan: «Un socialista, una voz, todos los socialistas, una voz».

Débiles en el debate interno

El comité director se celebró dos días después de que la crisis de los socialistas almerienses quedara cerrada con la elección de José Luis Sánchez Teruel, afín a Griñán, como nuevo secretario provincial. Sánchez Teruel presidió ayer la mesa del comité de forma simbólica. Su triunfo ha significado también una victoria del secretario general en el pulso con los críticos. Griñán admitió que en el PSOE «somos fuertes en la unidad de acción, pero débiles en el debate puramente orgánico». Una autocrítica con una advertencia: «La unidad y la cohesión interna, no os engañéis, no es sólo un valor orgánico, sino que es, sobre todo, un valor político», enfatizó el dirigente socialista.

En las intervenciones a puerta cerrada los miembros del comité, en su mayoría los secretarios provinciales, intentaron tranquilizar a Griñán sobre esa unidad interna, según fuentes del partido.

El también presidente de la Junta no escatimó la autocrítica por los resultados electorales, que admitió que habían roto tres suelos hasta ahora del PSOE: Por primera vez no es el partido más votado en Andalucía; los votos perdidos no se han ido a la abstención o a IU, sino al PP, y la mayor movilización ha ido en beneficio de este partido.