El Puerta del Mar se hace con un equipo puntero para detectar tumores

Si se suma la especialidad de la radiología con la minuciosidad de la medicina nuclear, el resultado es una máquina llamada gammacámara que permite detectar lesiones de dimensiones muy reducidas a través de imágenes. No se trata de una tecnología traída del futuro, es un aparato que ya está disponible en el Hospital Universitario Puerta del Mar y de la que se beneficiarán una media de 3.000 pacientes al año. La consejera de Salud, María Jesús Montero, visitó ayer las instalaciones en las que se encuentra esta gammacámara. Montero explicó que el objetivo de esta «tecnología de última generación» es sumar la especificidad del estudio con isótopos radiactivos propios de la medicina nuclear, con la especialidad del estudio radiológico que ofrece la realización de un TAC. Con la combinación de ambas técnicas, se puede estudiar al mismo tiempo la función, forma, tamaño y localización de pequeñas lesiones con la posibilidad de conocer su naturaleza y por su puesto, realizar un diagnóstico más preciso y precoz.

De este tipo de innovación se beneficiarán sobre todo los pacientes de oncología ya que permite detectar carcinomas de muy escaso tamaño y por tanto controlar antes su evolución y tratamiento. Pero además, la gammacámara se usa en cardiología, para detectar procesos infecciosos difíciles de diagnosticar, lesiones óseas benignas, para el sistema nervioso y la endocrinología. La consejera de Salud subrayó que una de las principales característica de esta máquina es que permitirá un gran ahorro de tiempo ya que en una misma prueba se podrá hacer dos exploraciones, la del TAC y la de los isótopos radiactivos con lo que no se ahorrará solo el tiempo que se pierde realizando ambas pruebas por separados sino también el que el paciente tenía que esperar entre una y otra.

Con esta nueva adquisición, el servicio de medicina nuclear del hospital gaditano dispone ya de cuatro gammacámaras. En concreto, la que se presentó ayer sustituye una anterior cuya tecnología se había quedado obsoleta y era por tanto necesario renovarla. La inversión realizada en la compra de este nuevo aparato supera los 700.000 euros.

Para la adaptación de la sala donde se encuentra el nuevo equipamiento fue necesaria una inversión de 111.000 euros y consistió principalmente en un emplomado de las paredes y techo y la creación de una losa de hormigón en el suelo para una adecuada protección radiológica, dado que la gammacámara cuenta con TAC. La previsión que tiene el centro hospitalario es que esta nueva máquina sea capaz de atender a unos 11 pacientes al día, lo que significa unos 3.000 pacientes al año, entre el 25 y el 30% del total del servicio.

Regalo de Reyes

De la tecnología al trato personalizado. En su visita al hospital Puerta del Mar, la consejera se acercó hasta la nueva sala de fisioterapia infantil para ver la nueva decoración de este espacio que sumerge a los pacientes más pequeños en un océano. Fue la propia Montero quien explicó que la nueva decoración responde a los deseos de uno de los pacientes que pidió a los Reyes Magos un lugar «menos triste» y que diera menos miedo para hacer los ejercicios. Antes de esta sala, los menores eran atendidos en un espacio compuesto por una zona para las mujeres que se sometían a un tratamiento de linfedema y una sala para pacientes en general. Concretamente, esta última se utilizaba para la fisioterapia infantil cuando no había adultos.

La sala, de unos 32 metros cuadrados, ha sido decorada por artistas gaditanos con motivos marinos para alegrar a los más pequeños cuando tienen que hacer sus ejercicios. Montero destacó que «además de realizar los ejercicios, la actitud del niño es fundamental para llevar a cabo una buena recuperación y para poner en mano de los profesionales».