La alcaldesa resaltó las grandes dificultades que están encontrando para pedir dinero a los bancos. :: L. V.
Jerez

«Aquí tampoco hay un puto duro»

García-Pelayo recalca que han agotado el límite de endeudamiento y solo pueden pedir 6,7 millones de euros más hasta diciembre

JEREZ. Actualizado: Guardar
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A la alcaldesa de Jerez, María José García-Pelayo, no la pillaron ayer in fraganti con un micrófono abierto como a su compañera de partido, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre. Y es que cuando la primera edil jerezana dijo ayer con cierta ironía -y haciendo uso de las palabras que le pescaron a la madrileña- lo de que «aquí tampoco hay ni un puto duro», quiso decir exactamente eso, que las arcas municipales están esquilmadas, que no hay ingresos suficientes para salir del boquete ni siquiera en los próximos años y que ya ni las llamadas personales a los presidentes de las entidades bancarias dan frutos en forma de créditos.

No en vano, como reflejó ayer la regidora, el Ayuntamiento de Jerez ya ha agotado prácticamente su capacidad de realizar operaciones de tesorería y solo le queda la posibilidad de pedir un préstamo por un importe total de 6,7 millones de euros de aquí al final de este año. Si se tiene en cuenta que cada mes el Consistorio tiene una necesidad de al menos 10 millones de euros, lo que se pone en evidencia es que los próximos meses van a ser más que angustiosos para la administración local y, por ende, para la localidad.

Según García-Pelayo, la «credibilidad» del Ayuntamiento está tan en horas bajas que hoy por hoy «ningún banco quiere firmar de forma unitaria el crédito de 6,7 millones de euros de préstamo». Eso ha obligado al ejecutivo a dividir este importe en tres paquetes de algo más de 2,2 millones cada uno para tratar de cerrar un acuerdo con tres entidades distintas.

Y por si fuera poco el que se haya tocado el techo de endeudamiento, la alcaldesa expuso ayer que por el momento el Ayuntamiento de Jerez no puede acudir a la convocatoria de créditos ICO para pagar deuda que ha aprobado el gobierno central. La razón es que para poder tener derecho a estos fondos que están vinculados a la Participación por Ingresos del Estado (PIE) hay que llegar a un acuerdo con la Administración central para que levante el embargo de estas partidas. «El delegado de Economía, Enrique Espinosa, se reunirá en breve en Madrid con el gobierno central para cerrar un convenio», adelantó la primera edil.

Cuando eso ocurra el Consistorio tendrá derecho a unos 10 millones de euros más este año para pagar las facturas de operaciones o facturas pendientes de consignar (unos 400 millones de euros), a los que se sumará dentro de unos meses el préstamo de inicio de legislatura (20 millones).

Incluso para abonar la paga extra faltan aún unos 900.000 euros, además de que será necesario convocar un pleno extraordinario el lunes para obtener fondos al aprobar una actuación de ingeniería financiera que prevé rescindir un crédito de Emuvijesa y modificar otro de Jereyssa para poder pedir más dinero a los bancos rebajando el techo de endeudamiento.

De seguir así la cosa, y si no se toman medidas como los recortes propuestos, la propia alcaldesa llegó a decir que «no queda otra alternativa que echar la llave y cerrar, y eso no lo podemos hacer».