Acuerdo con alfileres en la UE
Solo el crecimiento permitirá salir de la crisis y de los crónicos remedios artificiales
Actualizado: GuardarSobre la cumbre europea de ayer ha vuelto a planear la bancarrota de Grecia, que podría contagiar a toda la eurozona. Solo un acuerdo voluntarista entre los 27 Estados miembros parece haberla evitado. El segundo rescate de la Unión y del Fondo Monetario de Grecia irá adelante este verano y será precedido de una ayuda inmediata de emergencia. La entrega de más dinero para rescatar el primer rescate de hace un año debe estar respaldada por un nuevo plan griego de mayores medidas de austeridad, más reformas y nuevas privatizaciones, que sería aprobado el próximo martes en el Parlamento heleno, todavía no se sabe con qué apoyos, pues no hay la deseable unidad entre los distintos partidos ante una emergencia nacional. Por el contrario, el clima político en Grecia no permite albergar muchas esperanzas, pues predomina el rechazo a las subidas de impuestos y a los recortes de empleos públicos y de gasto, tanto por la derecha en la oposición como por la izquierda en la calle. En Bruselas, sin embargo, hay unanimidad en avanzar en este pacto, aunque esté cogido con alfileres. No se quiere dejar caer a Grecia, no porque no se lo merezca después de falsear las cuentas repetidas veces, sino por los efectos muy negativos sobre el conjunto del euro que esta suspensión de pagos podría tener. La crisis del euro se debe abordar con un reparto adecuado de culpas, entre prestatarios, prestamistas y los gobiernos que incumplieron primero el Pacto de Estabilidad. Por eso los líderes europeos están convenciendo a los bancos de sus países de que ayuden de forma voluntaria a refinanciar a Grecia. La crisis se superará del todo con el crecimiento y sin él no se saldrá del laberinto, por mucho que se remedie de forma artificial y de forma periódica la financiación de los miembros del euro. Los 27 acordaron también nombrar al italiano Mario Draghi nuevo presidente del Banco Central Europeo, un banquero experimentado, que debe contribuir a recuperar el prestigio de esta institución sometida cada vez a más críticas.