España reafirma que comenzará la retirada de Afganistán en 2012
Los 500 soldados desplegados en Herat se trasladarán a Badghis este año para formar al Ejército afgano y combatir a la insurgencia
MADRID. Actualizado: GuardarUn día después de que Barack Obama anunciará «el comienzo» del fin de la guerra de Afganistán, donde Estados Unidos va a retirar a un tercio de sus soldados (33.000) en los próximos doce meses, España reafirmó que cumplirá con el calendario de salida trazado en la cumbre de Lisboa de la OTAN, celebrada en noviembre.
El Ministerio de Defensa confirmó ayer que los primeros militares de nuestro contingente, formado por 1.500 efectivos, se irán en 2012, una vez que se inicie la transferencia de la autoridad a las fuerzas de seguridad afganas en Badghis, la provincia bajo mando español al noroeste del país.
La retirada se hará de forma gradual y progresiva, durará entre 12 y 18 meses, y se prevé que esté concluida en 2014, fecha fijada por la OTAN y por Estados Unidos para el repliegue definitivo de la misión internacional.
Este anuncio coincide con los primeros movimientos del Ejército español en Afganistán. En próximas fechas y hasta final de año tendrá lugar el traspaso del poder a los afganos en Herat, la otra provincia con presencia española. Los 500 soldados que participen en este proceso no volverán a casa, como en algún momento se pudo insinuar, sino que pasarán a reforzar el contingente de Badghis, compuesto por un millar de efectivos.
Este movimiento evitará un nuevo aumento de las tropas en Afganistán, tal y como manifestó el miércoles la ministra Carme Chacón en los pasillos del Senado. «El aumento que tuvimos que hacer ya lo hicimos y ahora vamos a incrementar el número de soldados en las OMLT (los equipos de instrucción y capacitación de las fuerzas de seguridad afganas)», dijo.
En febrero de 2010, la ministra solicitó al Congreso la autorización para enviar al país asiático 465 efectivos más, de los cuales 90 se integrarían en las nuevas OMLT de Badghis. Fue la última vez que España reforzó su contingente hasta alcanzar los 1.550 soldados actuales.
Ataques
El «redespliegue» de fuerzas de Herat a Badghis se ha tomado en virtud de la necesidad de formar al Ejército afgano y por el recrudecimiento de la violencia en esta provincia con la llegada de la primavera. Desde finales de marzo, Defensa ha confirmado 11 ataques de la insurgencia, la mayoría con artefactos explosivos improvisados -conocidos como IED- y también con el lanzamiento de cohetes a la base 'Ruy González de Clavijo' de Qala-i-naw, capital de Badghis.
El último incidente, acaecido el pasado sábado, estuvo a punto de costarles la vida al teniente Agustín Gras y a la soldado Jennifer García, quienes viajaban en un vehículo blindado en las inmediaciones de la localidad de Ludina. Un IED explotó al paso del 'Lynce' e hirió de gravedad a los dos militares, a los que hubo que amputar una pierna. Solo el blindaje antiminas del 'Lynce' evitó que sufrieran «un mal mayor», según Chacón.
Desde el punto de vista operativo los desafíos también son importantes. Por una parte, España se ha comprometido a formar 2.000 militares afganos a lo largo de este año, es decir, uno de cada 20 de los que se necesita para cumplir el objetivo global de la OTAN para 2011, situado en 40.000 efectivos. Del otro lado, la transferencia de la autoridad en Bagdhis dependerá en buena medida de su estabilización, y en la actualidad existen zonas donde la insurgencia combate con ahínco.
Estos lugares están situados al norte de la provincia, donde las tropas españolas han extendido su estrategia de seguridad a través de los puestos operativos avanzados. Estas pequeñas bases sirven para dar seguridad a las rutas de carretera que atraviesan la provincia y cuya construcción es clave para la misión internacional. Se tratan de la 'ruta Lithium' y la 'ring road'. Pasos francos donde, paralelamente, se producen la mayoría de los ataques de la insurgencia.