«Entiendo muy bien la psicología de la mujer»
El jerezano se adentra en la historia de 'Sofonisba Anguissola, una pintora en la corte de Felipe II', una novela que presenta mañana en la APC Mariano Rivera Cross Escritor
CÁDIZ. Actualizado: GuardarLa única condición que se ha autoimpuesto Mariano Rivera Cross (Jerez, 1945) para la presentación de su novela 'Sofonisba Anguissola, una pintora en la corte de Felipe II' es que le haga los honores una artista. En clave femenina está escrita la «increíble» historia de la pintora de Cremona, la mujer que consiguió colarse en la monarquía más poderosa de la época y retratar a sus distinguidos miembros. El novelista, dramaturgo y poeta gaditano hace mini gira en las próximas semanas. Mañana, junto a Amalia Quirós, pone de largo esta novela en la APC y el próximo 6 de julio estará en Cremona, ya que la obra ha sido traducida al italiano. Entre presentaciones, el que fuera fundador de la tertulia 'La Parra vieja' ultima el libro de poesía 'Entre sombras' y una nueva novela, 'Las manos mágicas', en esta ocasión centrada en pleno siglo XXI.
-¿Cómo descubrió a Sofonisba Anguissola?
-Fue durante el periodo de documentación para la novela 'La parrilla invertida, el corazón de Felipe II'. Apareció el nombre de Sofonisba y me lo apunté. Después de escribir esa y otras obras, volví a su historia y quedé fascinado con el personaje.
-Un personaje del que poco se sabía...
-Sí, hay poco escrito de ella y todo en inglés e italiano. Hasta hace bien poco no se ha reconocido esta figura, no solo su vida, sino su impresionante carrera pictórica.
-¿Fue Sofonisba Anguissola una mujer adelantada a su tiempo?
-Totalmente. Hoy en día que por fin se le está dando el lugar que merece a la mujer, la figura de Sofonisba se antoja como un modelo a seguir. Hace semanas me encontré con una agradable sorpresa. En la exposición 'Heroínas' del Museo Thyssen figura un autorretrato de esa pintora, por lo tanto, está considerada como tal.
-¿Qué hizo tan especial a esta pintora de la corte de Felipe II?
-Si difícilmente se podía ser una mujer libre en esa época, más lo era dedicarse a la pintura y en la corte más poderosa del mundo. Sofonisba vivió 93 años, algo también muy poco usual en esos tiempos; muchos de esos años los dedicó a luchar, pese a que le hicieron la vida imposible, por pintar a todos los miembros de la monarquía. Un camino que empezó desde muy abajo, siendo dama de compañía de Isabel de Valois.
-Una de las primeras feministas de la historia, entonces.
-No sé si feminista, pero sí una de las primeras que más luchó por la libertad de las mujeres. Ella se basó mucho en la obra de Christine de Pizan, la veneciana, una de las intelectuales más importantes del medievo e impulsora de las Querelle des Femmes, el movimiento en favor de la libertad femenina.
-Si difícil fue reconocer su vida, más complicado lo tuvo para ser recordada por su obra...
-Ella se adelantó a 'Las Meninas' de Velázquez con un retrato de Bernardino Campi en el que se representa. Al final de su vida va perdiendo la vista y su forma de pintar cambia. Ese cambio tiene mucho que ver con lo que después haría Van Dick. Sin embargo, no fue hasta hace unos años cuando empezó a catalogarse su obra, que hoy se cifra en un centenar. Muchas de ellas figuraban como si las firmase Tiziano, y otra atribuida a El Greco, 'La dama del armiño', también es de Anguissola.
-Con tanta alabanza al papel de esta pintora la pregunta es obligada, ¿qué le han comentado sus lectoras sobre la novela?
-No quiero parecer vanidoso, pero la verdad es que he recibido muy buenas críticas de parte de ambos sexos. Las lectoras me han preguntado que cómo conozco tanto a las mujeres, que soy capaz de meterme muy bien en su psicología. También extraña que un hombre escriba sobre una mujer emancipadora, siempre se piensa que para escribir bien sobre mujeres has de ser mujer o homosexual y yo no soy ninguna de las dos cosas.
-La mayoría de las autoras detesta el término de literatura de mujeres...
-Bueno, no todas. Mi gran amiga Marina Mayoral insinúa que en la cátedra de literatura debería haber una asignatura específica de literatura de mujer, yo creo que es pasarse pero tampoco lo veo mal.
-Entonces, ¿está el hombre del siglo XXI preparado para esta historia?
-A los hombres también les ha gustado mucho esta historia. Mis íntimos piensan que he pintado a la mujer ideal, a lo que ellos consideran una mujer diez. Yo no lo he hecho conscientemente, todo lo que digo de Sofonisba y de Isabel de Ossorio (presente en 'La parrilla invertida') es cierto. En el caso de Anguissola he cubierto los huecos con lo que no he podido describir con los detalles reales.
-Usted también es un artista completo. Poesía, autor y director de teatro, novela... ¿De qué depende?
-Cada estado de ánimo invita a uno u otro género, aunque sea de diferente manera, siempre se está sintiendo algo. Cuando se está más predispuesto a la realidad, la novela; cuando se tiende a la sátira y la ironía, el teatro; y cuando uno está más trascendente, a la poesía.