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Cerveza artesanal hecha en Cádiz
Una empresa de La Línea distribuirá esta bebida al estilo inglés, que elabora desde su fábrica de Palmones
Actualizado: GuardarEl único detalle pendiente es el etiquetado de los botellines, que está ahora en fase de pruebas, pero Mercedes Lynch, propietaria de la empresa Kettal junto a Tim Revill, espera que las primeras botellas de su cerveza artesanal salgan por la puerta de la fábrica a finales de julio. Será el punto final de un proyecto que llevan ya desarrollando varios años, el de poner en la provincia la primera fábrica de cervezas artesanales al estilo inglés, un viejo sueño de Tim Revill, 60 años, nacido en el Reino Unido aunque ya lleva muchos años establecido en el Campo de Gibraltar. Lynch, 49 años, de madre linense y padre irlandés, lleva ya muchos años trabajando con él y decidió unirse a este proyecto en el que han invertido más de medio millón de euros.
La idea estuvo gestándose varios años, aunque fue fundamental la aparición del tercer protagonista de esta historia, Jonah Jones, el maestro cervecero que se encarga de elaborar el producto. Jones es inglés de nacimiento aunque gran parte de su vida se ha desarrollado en Australia, donde estuvo trabajando como maestro cervecero. Jones llegó a Gibraltar donde se afincó y ahí conoció el proyecto de Revill y Lynch y se unió a ellos. Desde entonces la idea ha avanzado. En agosto de 2010 abrían en el polígono industrial de Palmones (calle Brujula,5. 956675430) el bar restaurante Kettal, un establecimiento de dos plantas de un estilo rústico en el que llamaba la atención una gran cristalera tras la que se podía ver la caldera en donde se elaboraba la cerveza, la gran atracción .
El local logró atraer al público así que un año después están a punto ya de llevar a cabo la segunda fase: comercializar la cerveza que elaboran al exterior y no sólo venderla en su local. Están construyendo la ampliación de su fábrica, sobre todo en lo que se refiere a capacidad para almacenar la cerveza ya elaborada ya que piensan mantener la capacidad de producción de 1225 litros diarios, la que da su caldera. Esta, precisamente, que se conoce con el nombre en inglés de kettel, fue el que terminó dando nombre a la empresa Kettal, que por su parecido al saludo en español «¿que tal?» le da un aire divertido e informal.
Pero la cerveza que se sirve en Kettal es muy diferente a la que estamos acostumbrados a beber en España. Tiene mucha menos espuma, ya que lleva muy poco gas carbónico, que es el que la produce. La segunda característica es que se sirve mucho menos fría y la tercera, que es mucho más ligera y produce menor sensación de saciedad. Además, la cerveza, en el bar que tienen en Palmones, se sirve «sin filtrar», es decir, sin realizar ningún proceso posterior que evite que esta se estropee.
Habitualmente la cerveza que bebemos está pasteurizada y filtrada para que no se estropee con el paso del tiempo. Sin embargo la que sirven en el restaurante de Los Barrios no tiene ninguno de estos dos procesos, se toma tal como queda cuando termina el proceso de fermentación. Esto hace que tenga mucho más sabor, aunque también que tenga caducidad.
La idea de la empresa, pionera en la provincia y de las pocas que hay en España, es que tanto la cerveza que sirvan en su establecimiento como la que podrán distribuir en barriles a otros negocios cercanos sea sin filtrar, aunque la que se envase en los botellines, aún manteniendo su caracter artesanal, si será filtrada ya que de lo contrario se estropearía.
La empresa comercializará seis tipos de cerveza en botellines, las mismas que sirve en su restaurante. Estas irán desde la «cerveza de verano» bautizada con el nombre de 'Trillo' o la 'Espiga', las más ligeras, hasta la negra o la roja. Sus sabores y colores varían en función de los ingredientes. Todas, se basan, de todas formas, en la malta de cebada que es el cereal a partir del cual se obtiene la cerveza. La malta es la cebada que ha germinado y que luego se tuesta para hacer la cerveza. La que utilizan en Kettal se trae de Centroeuropa. Los otros ingredientes son el lúpulo, una planta que aporta el amargor y levadura. Una parte fundamental es el agua. Se utiliza agua del grifo que después se trata para conseguir que tenga unas características idénticas a la que se usa en la ciudad de Burton y procedentes del río Trent, en el Reino Unido. Este agua es considerada por muchos artesanos cerveceros como la mejor para hacer cerveza.
Mercedes Lynch señala que al ser una cerveza artesanal, no siempre sale igual, lo que es uno de sus atractivos. El proyecto es abrir junto al restaurante una tienda en la que se podrá también vender la cerveza e incluso pequeños barriles de uso doméstico.
Carta muy curiosa
Ahora en el restaurante se ofrece incluso una tabla de cerveza que permite, con 6 pequeños vasos, que los clientes prueben todas las especialidades. Para acompañarlas la oferta gastronómica es muy curiosa, una mezcla de cocina de varios paises aunque con un indudable toque inglés. Así a un apartado de sandwiches, ensaladas y hamburguesas se unen platos como un pescado frito a la cerveza, que sería parecido al pescado rebozado o las pavías de merluza que se sirven en Cádiz, pero que se acompaña de patatas fritas. Una versión de uno de los platos más populares del Reino Unido: el 'fish and chips'. En el que sirven en Kettal también se ofrece la posibilidad de acompañarlo con puré de guisantes.
También hay en la carta una ternera guisada con verduras y cerveza, una costilla de cerdo asada con especias, miel y mostaza, que se puede tomar con patatas asadas o un surtido de salchichas inglesas que se sirve con puré de patatas y 'baked beans', un potaje de habichuelas típico inglés, que se suele tomar en los desayunos y que consiste en guisarlas en una especie de salsa de tomate. El plato de salchichas se complementa con cebollas y salsa gravy, otra habitual de la cocina inglesa que es un concentrado obtenido de cocer largo tiempo verduras y carnes.
La misma salsa se sirve con otro plato tradicional inglés: el 'Sunday roast', que es el almuerzo inglés de los domingos. En el restaurante, para seguir esta tradición, sólo se sirve los domingos al mediodía y consiste en una carne que se hace al horno y que se pone con patatas y verduras.
En la carta también figura un pastel de cazadores que se hace con carne de venado guisada con cerveza y que se cubre con un puré de patatas. El conjunto se ofrece gratinado.