Benedicto XVI. Narrará la vida de Ratzinger con motivo de su visita a Madrid. :: R. C.
Sociedad

«¡Ya me gustaría estar como el dibujo!»

Chiqui Martí protagoniza un cómic en el que se mezcla realidad y ficción

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Todo empezó como una broma tras publicarse su biografía, 'Piel de ángel'. Su autor, Hernán Migoya, se lo propuso y Chiqui Martí soltó una enorme risotada mientras se preguntaba: «¿Quién soy yo para tener un cómic?». Cuatro años después se publicaba 'Chiqui ¡Bang! ¡Bang!' (Glénat), tebeo a medio camino entre la realidad y la ficción en el que la stripper se convierte en una heroína capaz de paralizar con su cuerpo desnudo la voluntad de todo aquel que la contempla. Su misión: pararle los pies al hijo del presidente del Gobierno.

- ¡Ya me gustaría estar como el dibujo! Sí que soy yo, pero mucho más voluptuosa. Entiendo que es un cómic y todo es un poco exagerado. No tengo ese pecho ni ese culo, pero la figura sí que es la mía. En especial me reconozco muchísimo en gestos como puede ser moviendo el pelo, quitándome los guantes...

- No puse pegas por el dibujo, pero tuvimos que cambiar algunas cosas. Primero porque en ninguna de las viñetas salía con tacones: me dibujaban descalza o en deportivas ¡y yo siempre voy en tacones! Tampoco se veían ninguno de mis tatuajes, y tenían que salir por alguna parte. Y en una de las viñetas en una actuación salía completamente desnuda y yo jamás he enseñado el pubis. Es un sello muy mío, de ahí que al final me pusieron cubriéndome con la mano. Fueron tres años de trabajo en los que estuve muy implicada.

- Me veo un poco patosa, porque todo lo que va sucediendo en el cómic me va despojando de mi ropa. Lo que es gracioso para el lector, como por ejemplo que me caiga de un rascacielos y se me vaya enganchando ropa, para mí como profesional me da una imagen como de un poco patosa. Pero entiendo la ironía.

Superhéroes totales

Chiqui Martí no es la única española que ha saltado a las novelas gráficas. Eso sí, en una forma muy distinta a la moda que impera ahora en Estados Unidos. Aquí no se narran sus biografías. Los famosos se convierten en auténticos superhéroes con una misión muy alejada de su vida cotidiana, aunque se dé alguna pincelada de ellas. Por ejemplo, el futbolista Fernando Torres se transforma en un gladiador romano en un tebeo editado por SM en el que, por supuesto, hay algún que otro balonazo en la arena del Coliseo de Roma.

Los Estopa, con motivo de su décimo aniversario en la música, lanzaron un tebeo en el que los músicos protagonizan una historia en la que no falta humor, acción, un argumento con la humanidad en peligro o golpes de efecto al más puro estilo Marvel. Muy distinto del que se está preparando con motivo de la visita de Benedicto XVI a Madrid este verano. En sus páginas no habrá superpoderes que valgan... pero sí sus obras y milagros.