Weiner se presentó, ayer, con un gesto resignado ante la prensa para anunciar su dimisión. :: JUSTIN LANE / REUTERS
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Dimite un congresista de EE UU tras desnudarse en Twitter

Weiner, que todavía alberga esperanzas de continuar en la política, pidió perdón por el «bochorno» que ha causado su conducta

NUEVA YORK. Actualizado: Guardar
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Anthony Weiner, el influyente demócrata en el Congreso estadounidense que aspiraba a competir por la alcaldía de Nueva York, cedió finalmente a las presiones y dimitió de su cargo después de protagonizar un escándalo sexual por enviar fotos suyas en ropa interior por la red Twitter a varias mujeres.

Oculto durante más de una semana en un retiro autoimpuesto para «curarse de sus adicciones», el legislador de 46 años compareció poco después de las 2 de la tarde de ayer ante los medios en el barrio de Brooklyn donde entró en política en 1991. «Quiero pedir perdón por los errores personales que he cometido y el bochorno que ha causado mi conducta», añadiendo que albergaba esperanzas de seguir sirviendo a los ciudadanos. «Desafortunadamente, la distracción que todo esto ha generado hace imposible este objetivo».

La primera señal de que el reclusivo Weiner había cambiado de postura y estaba dispuesto a dar el paso que se le pedía a gritos vino de la mano de algunos amigos íntimos durante la mañana de ayer. Posteriormente, el congresista llamó la exportavoz de los demócratas en la Cámara de Representantes y una de las voces más críticas en este proceso, Nancy Pelosi, para hacer oficial su renuncia. Su reconocimiento final se produce tras un penoso recorrido que ha mantenido al país en vilo y donde se han mezclado su obstinación en negar la importancia de los hechos con una cascada de fotografías de su rostro desnudo enviadas a chicas jóvenes y que han sido aireadas por los medios casi cada día desde el estallido del escándalo.

Pese a ese coqueteó con la idea de quedarse que nadie compartía, sus posibilidades de mantenerse en el cargo se redujeron drásticamente una vez que Barack Obama terció en el asunto. El presidente no habló mucho, simplemente aprovechó una entrevista en televisión para decir que si él estuviera en el lugar del congresista renunciaría.

Mientras tanto, la Comisión Ética de la Cámara de Representantes investiga formalmente la conducta inapropiada del legislador, que incluye el intercambio de mensajes privados con una joven menor de edad de Delaware. Además de Obama y Pelosi, Weiner había llegado a la conclusión de retirarse luego de hablar a fondo con su esposa, que se encuentra embarazada. Como jefa de personal de la secretaria de Estado, Hillary Clinton, la mujer no estaba en el país cuando comenzaron a aflorar las primeras evidencias del escándalo.