Las fuerzas de la OTAN recrudecen sus ataques contra las tropas leales a Gadafi

Once objetivos militares, incluido una base aérea del régimen en Trípoli y dos lanzaderas de misiles tierra aire, fueron destruidos ayer por las fuerzas de la OTAN en lo que representa un aumento de las operaciones de combate sobre la capital libia. La ofensiva, compuesta por un total de 48 misiones de ataque desarrollados en las últimas horas, acabó también con un depósito de municiones de las tropas leales a Muamar Gadafi en las inmediaciones de la localidad de Waddan, un coche militar con armas acopladas cerca de Yafrán y otros dos vehículos del mismo tipo cerca de Brega.

El asalto de los aliados se extendió a las proximidades de Misrata, la principal ciudad en el oeste del país bajo control rebelde, donde por los menos tres carros de combate del Ejército del dictador resultaron abatidos. A última hora de la tarde de ayer, la televisión estatal del país norteafricano informó, por su parte, de que al menos doce personas murieron a causa de un ataque de la OTAN contra un autobús de pasajeros a la entrada de Kikla, al suroeste de la región.

El recrudecimiento de los bombardeos contra las fuerzas del régimen se inició justo se cumple una semana de la decisión de los ministros de Defensa del organismo internacional de ampliar durante 90 días las actividades en el país norteafricano. El propio secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, pidió en esa última reunión a los Estados que contribuyen a aplicar la zona de exclusión aérea que participen además en las operaciones de ataque y eliminen las restricciones que imponen a sus contingentes para dar la «máxima flexibilidad operativa» a los mandos sobre el terreno.