POBRES
Actualizado: GuardarProbablemente, alguna vez, en la mente de nuestros gobernantes más «la veo medio llena», se iluminó la posibilidad de que estuviéramos representados en la foto del G8, un sueño como otro cualquiera. Eran otros tiempos, claro. A día de hoy, o mejor dicho: a ruina de hoy, nos tenemos que conformar con pertenecer al selecto grupo del P7, los siete países con mayor riesgo de pobreza de la Unión Europea. A mi me parece bien, el caso es estar arriba en alguna lista, y ya que lo de Eurovisión se nos está atragantando en las últimas ediciones, pues nos estamos especializando en esto de la pobreza. Hombre, no vamos a cantar victoria, todavía hay seis países que nos ganan en pérdidas, Grecia es mucho Grecia, pero no tengo duda que si arrimamos todos el hombro en el ejercicio del despilfarro, en unos pocos años seremos los primeros de los últimos. Yo tengo esperanza, porque veo que dentro de cada uno de nosotros habita un pobre que quiere salir. Se ve en las miradas de la gente. Es como si estuviéramos esperando una señal para salir del armario del bienestar y de la falsa riqueza. Además, lo estamos haciendo de maravilla, utilizamos el despiste como si fuéramos jugadores de póker. Estamos engañando a los demás países con una imagen asociada al éxito: Nadal, la selección de fútbol, algunos domingos de Alonso, los motoristas, los alpinistas... El mundo, y Europa en concreto, cree que somos unos ganadores, que el éxito, el sol, los toros y la dieta mediterránea van de la mano. Y nosotros, a la chita callando, sin hacer el menor ruido, subiendo hacia abajo como unos campeones. Por fin vamos a poder lucir pantalones con remiendos como los que vestían nuestros abuelos. Y comer pan de ayer. Eso sí, si queremos liderar la Europa Pobre, que a nadie se le ocurra sellar una bonoloto, que te puede pasar como al pobre indignado de la Puerta del Sol, que se ha quedado sin argumentos indignos de golpe y porrazo. Le han caído un millón trescientos mil euros de multa a su conciencia. Y es que ni el pobre más aguerrido está a salvo de la riqueza. Pasen buen día.