FERIAS, PREMIOS Y LIBROS
Piglia, Skármeta, Vásquez y Roncagliolo ofrecen cuatro miradas distintas de la historia de Iberoamérica
Actualizado: GuardarVan y vienen. Hoy en Sevilla, mañana en Madrid. Los autores llevan su libro bajo el brazo y la pluma afilada para hacer felices a sus lectores. «Para Mary un fuerte abrazo».. O más personal «por favor ponga: este libro es para Felipe con una historia que se parece mucho a la nuestra y de paso para que leas algo en tu vida». Y el autor, obediente, esbozando la mejor de sus sonrisas, rubrica la dedicatoria dictada. El libro renace cada primavera, y son muchas las personas que pasean por entre las casetas de las ferias mirando de refilón a los autores, confiando que algún famoso, apoyado por sus apariciones en televisión, se haya atrevido también con la literatura o simplemente dejándose llevar por la marea humana que camina por largos paseos como el del Retiro madrileño porque no tiene otra cosa mejor que hacer y mirar no cuesta nada.
Se imaginan, en unos años, que las filas para que nuestros autores favoritos nos firmen estuviesen llenas de libros electrónicos. La ventaja es que sería menos cansado y con la rúbrica bastaría. El texto lo podríamos poner y cambiar a nuestro antojo. ¿Que nos hemos cansado de nuestra pareja de turno y buscamos una nueva relación?Pues nada, cambiamos el nombre del susodicho o susodicha en cuestión y ya tenemos los primeros pasos dados.
Mientras que ese tiempo futuro, que ya es presente, llegue definitivamente, detengámonos en algunos autores que estampan su firma. Las que traigo hoy han sido premiadas en los últimos meses y sus obras miran todas a Iberoamérica. Ya se sabe que el argentino Ricardo Piglia ganó el premio de la Crítica con 'Blanco nocturno', una novela calificada de negra pero que en realidad es una exploración del fenómeno literario y de la reciente y pasada historia de su país.
Piglia se mueve en la Pampa; y en Chile, país limítrofe, se desarrolla la última novela de Antonio Skármeta, 'Los días del arco iris', una historia de «dichas y quebrantos», parafraseando a Violeta Parra, que sitúa la acción en 1988, año en que se celebró el plebiscito que determinó la no continuidad del general Pinochet. El pueblo chileno fue capaz de decir «no» al dictador y reiniciar la senda democrática, apoyada en una campaña llena de imaginación que pudo derrotar al engranaje de la dictadura. El mejor Skármeta firma esta obra que ha merecido el Premio Planeta-Casa América y que habla de tiempos oscuros pero con una puerta abierta a la esperanza y el futuro porque como dice uno de los protagonistas : «la gente tienen derecho a ser feliz aunque no tenga permiso».
Tampoco se le dio permiso a los colombianos, sobre todo en los años setenta, cuando el narcotráfico llevó al país al borde del abismo. Juan Gabriel Vásquez, que ha ganado este año el premio Alfaguara por 'El ruido de las cosas al caer', ahonda en las raíces del mal de aquella Colombia en la que nació y el miedo de toda una generación que tuvo que soportar la violencia que se sufrió en todos los rincones del país.
Vásquez sigue mirando a Colombia desde Barcelona, donde reside desde hace algunos años, como Santiago Roncagliolo, que en 2006 ganó el mismo premio con 'Abril rojo' y que en las últimas horas ha sido galardonado con el 'Premio Independiente de Ficción extranjera' a la mejor novela traducida en el Reino Unido durante 2010.
Como en las anteriores obras citadas se mira la historia reciente de un país y en este caso sobre la guerra que se libró entre el ejército y la organización terrorista 'Sendero Luminoso' durante el mandato de Fujimori en los años noventa. Estructura de 'thriller' para una narración que muestra un Perú en que, como decía Roncagliolo, «la muerte era la única forma de vida».
Cuatro autores, cuatro países, cuatro miradas, y siempre la creación y la imaginación de la literatura que ahora reposa, en busca del lector, en las estanterías de las ferias que dan color a esta primavera.