Retiran de las playas 23 toneladas de residuos, agua y arena por el vertido

El dispositivo de limpieza desplegado en las playas de Algeciras para retirar el vertido causado por la explosión de dos tanques en Gibraltar ha recogido ya 23 toneladas de mezcla de residuos, agua y arena. La Subdelegación del Gobierno de la Junta de Andalucía en el Campo de Gibraltar informó ayer en un comunicado de que los trabajos se han desarrollado «con normalidad» en las playas de El Rinconcillo, La Concha, Chinarral y Getares.

El vertido, procedente de los tanques que ardieron el pasado martes en el puerto de Gibraltar, ha afectado a seis kilómetros lineales de playa, de las que la más afectada ha sido El Rinconcillo. El dispositivo está coordinado por el Grupo de Emergencias de Andalucía (GREA-112), dependiente de la Consejería de Gobernación de la Junta de Andalucía, y contaba, al término de la jornada, con cerca de 90 personas, 29 de las cuales son operarios del Ayuntamiento de Algeciras. Precisamente el alcalde en funciones de la ciudad, Diego Sánchez Rull (PSOE), anunció que el Ayuntamiento de la ciudad ha presentado en el Juzgado una reclamación contra quien presuntamente parece ser la empresa responsable del vertido, concretamente la compañía Shell Petroleum, «abierta también a las responsabilidades que pudiera tener la Administración gibraltareña».

En un comunicado, Sánchez Rull señaló que «estas responsabilidades hay que depurarlas cuanto antes», ya que en episodios contaminantes anteriores se han encontrado con numerosas dificultades para que el Consistorio y aquellas instituciones que movilizan medios humanos y técnicos para devolver la situación a la normalidad, vean compensados esos esfuerzos económicos, «que solo buscan minimizar los efectos perjudiciales que puedan tener para el conjunto de la ciudadanía».

Por su parte, el Partido Andalucista (PA) de Algeciras ha interpuesto una denuncia en el juzgado de instrucción número 2 de la localidad contra el ministro principal de Gibraltar, Peter Caruana, por un presunto delito ecológico. Los andalucistas criticaron a Caruana «por el desprecio a las ayudas que se le brindaron para minimizar los efectos» del accidente, que causó el vertido en las playas.