El yerno de los Tous, absuelto por la muerte de un presunto ladrón en legítima defensa

Por seis votos a favor y tres en contra, un jurado popular declaró no culpable al yerno de los Tous, Lluís Corominas, juzgado por matar a tiros a Sinani Gazmend, uno de los presuntos asaltantes que en 2006 pretendían atracar la vivienda de los afamados joyeros catalanes.

El veredicto, conocido ayer, considera que Corominas actuó en «legítima defensa» y que ante una «amenaza real, seria e inminente disparó por el miedo insuperable que sentía». Por esta razón, el jurado le exculpa del delito de homicidio por el que se enfrentaba a una pena de siete años y medio de prisión, según pedía el fiscal, o a 11 años y medio a entender de la acusación particular, que representaba a la mujer de la víctima. La juez, al conocer la decisión del jurado, decidió absolver al acusado.

Los hechos ocurrieron el 9 de diciembre de 2006. Ese día dos individuos encapuchados entraron en la finca de los Tous. Cuando Corominas se acercó a la vivienda, avisado por el vigilante, los dos presuntos ladrones ya habían escapado. Pero otros dos presuntos compinches permanecían fuera, en un coche. Corominas se dirigió hacia ellos y disparó.

El yerno de los Tous dijo en el juicio que «creía que no había nadie en el coche, si hubiera imaginado que había alguien, le juro por mis hijas que me habría ido hacia otro lado». «Luego me puse con mi vehículo paralelo al coche, añadió, y vi que dentro había dos personas vestidas de negro. No me lo esperaba. Estaba nervioso y tenso. Intenté chillar». «Los nervios me hicieron ver una pistola», dijo. «Vi un movimiento muy brusco y me vi muerto. El instinto me llevó a defenderme y eso me hizo disparar dos veces, sin mirar», explicó. Corominas apretó el gatillo dos veces con su rifle semiautomático. Una bala fue a parar a la cabeza de uno de los supuestos asaltantes, que murió dos días después en el hospital. El otro resultó ileso.