Los 'indignados' conviven con los comerciantes de la plaza del Arenal

La marea del 15-M de Jerez continúa su lucha ideológica y el grupo de acampados de Jerez permanecerá de «manera indefinida» tras la última asamblea celebrada en la jornada de ayer en la plaza del Arenal. «Por ahora seguiremos aquí. Ayer votamos seguir con nuestra protesta pacífica y no nos iremos hasta que se produzca el desalojo por parte de la Policía», algo que matizó el grupo 15-M de Jerez en un posterior comunicado en el que subrayaron que «creemos y confiamos en que este hipotético desalojo, no tendrá lugar al menos en un futuro próximo, ya que entendemos que nuestra actividad, plenamente pacífica, no supone ni supondrá ningún perjuicio para la comunidad». Además, los 'indignados' seguirán trabajando en las comisiones de barrio, órgano encargado de llevar toda la información a la zona más alejada del centro urbano, y han puesto en marcha una iniciativa que ya ha sido copiada «por Barcelona y Valencia» y que consiste en sellar el dinero de los ciudadanos que quieran hacerlo con el eslogan: 'Toma la calle'.

Con todo ello, los movimientos del 15-M en Jerez están siendo muy positivos y los comercios de la plaza del Arenal no se están resintiendo a este respecto. De hecho, desde la heladería La Ibense -local más cercano al núcleo de las protestas- apuntan que «hasta ahora no hemos tenido ningún problema. Siempre nos hemos encontrado con una actitud positiva por su parte y han atendido a nuestras peticiones cuando lo necesitábamos. Nos preocupaba un poco el tema de los veladores, aunque desde el primer momento no ofrecieron ningún problema y han ayudado».

«No hemos notado ningún dato significativo desde el comienzo de la acampada. Veo muy bien lo que están haciendo y el respeto que están mostrando en cada una de sus acciones», subrayan desde el céntrico comercio.

Una idea parecida se afirma desde la farmacia anexa a la heladería: «Poco o nada influye, a nosotros no nos molestan», mientras que uno de los restaurantes próximos señaló que «no hemos notado nada, ni para mejor ni para peor».

Y es que pese al buen 'feeling' que existe en la plaza del Arenal, en otros puntos de la geografía española no hay una relación tan idílica. Sol se ha convertido en el punto central de las protestas y los comerciantes de la céntrica plaza pidieron la retirada de los cientos de carteles que invadían sus escaparates, cosa que ocurrió el martes pasado tras aprobarse en una asamblea. Granada es otro de los puntos donde los comerciantes han asegurado que tomarán acciones legales tras la caída del «60 y el 70 por ciento» en los comercios de la zona.